Muchas botellas de agua
de 33cl, especialmente las destinada a niños pequeños y a deportistas (es
decir, a gente que no para quieta ni siquiera para beber) cuentan con tapones
de seguridad de formas interesantes. Estos, por ejemplo, recuerdan un tanto a la
forma de una escafandra. El parecido es más evidente después de una primera capa de pintado básico.
Siempre conviene pegar la tapa para que no pueda abrirse
accidentalmente al manipularla, pues estropearía la capa de pintura. Estos “cascos” pueden ser
empleados tal cual como peones en algún juego de mesa de temática espacial,
para representar soldados o astronautas. También pueden servirnos como cabeza
de sustitución para alguna figura que haya perdido la suya ¡Mejor eso que andar
por ahí descabezado!
Aun queda mucho para que sea un producto terminado, pero la base de trabajo es clara.
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