NECRÓN (3) Nobleza depravada / Masacre en el coche-cama

EL TEMPLO DE LOS PERGAMINOS

¡ALERTA DE EXPOILERZ!

¡ALERTA DE EXXXTREMERZ!

Continúan las peripecias de Necrón y su ama en este tercer volumen donde se reúnen otras dos de sus aventuras.

Nobleza depravada comienza con Frieda y Necrón abandonando la isla sin nombre en la que transcurre la historia de Las mujeres araña, para ir en busca de los yacimientos de uranio. Una tormenta les obliga a aterrizar su bimotor en Normandía…

…donde Frieda es confundida con alguien a quien se esperaba, la baronesa Wunder, e invitada por error a una fiesta privada de mujeres de la realeza europea con un solo interés común: la tortura extrema. Aceptando el papel que le han asignado por error como una de las asistentes a esta peculiar reunión, Frieda participara de buena gana en la tortura y asesinato de algunos de los criados de su anfitriona, la condesa de Fontanac. De hecho, incluso enseña unas cuantas torturas nuevas a la condesa y sus amigas.

Necrón (al que Frieda mantenía oculto en un ataúd, como equipaje) es descubierto por las criadas de la condesa, que suponen que es simplemente otro de los depravados juegos de las invitadas. Informan de ello a la condesa de Fontanac, que impresionada por la enorme... presencia... de Necrón, decide quedárselo y hacer creer a Frieda que ha huido. 

La llegada de la autentica baronesa Wunder, la mujer cuya identidad Frieda estaba suplantando precipitan los acontecimientos. Frieda termina encerrada en una celda de la que no tarda mucho en escapar, solo para descubrir que Necrón no ha acudido en su ayuda porque está muy ocupado atendiendo las múltiples demandas del grupo de damas. Necrón parece bastante conforme con el trato que etá recibiendo, pero se encuentra muy condicionado a obedecer las órdenes de Frieda. Cuando esta aparece y le ordena capturar y maniatar al resto de asistentes, este le obedece a pesar de toro. A continuación les inyecta una mezcla de drogas experimental que provoca en ellas un envejecimiento acelerado, y abandona la mansión de Fontanac tras saquear la caja fuerte. 

Sin embargo, una de las invitadas no resulta afectada por la mezcla, y se retira discretamente mientras promete mentalmente volver a encontrarse con Frieda… cosa que nunca sucede. Otra línea argumental dejada en reserva y luego olvidada.

En Masacre en el coche-cama Frieda toma un tren para Ámsterdam. Su plan inmediato es vender las joyas que robó a la condesa de Fontanac para financiar la explotación de los yacimientos de uranio.

Durante la noche, su equipaje (Necrón) se aburre y se dedica a explorar los diversos compartimentos, provocando algunas muertes, como es habitual en él. En el tren cunde la alarma cuando comienzan a aparecer cadáveres medio devorados por todas partes. 

El tren se detiene en una estación pero no permite salir a nadie, hasta que se presentan los gendarmes. Un grupo de ellos fuertemente armado aborda el tren y empieza a hacer preguntas. Esto no impide que Necrón siga deambulando por los compartimentos matando gente, por lo que Frieda, viendo que la cosa va para largo, decide secuertrar todo el vehículo. Accede hasta la locomotora y amenaza con una pistola a los maquinistas para que lo pongan en marcha, matándolos a continuación mientras Necrón hace lo propio con los gendarmes y revisores.  

Ambos abandonarán el tren en medio de la campiña belga tras dejarlo preparado para descarrilar, provocando la innecesaria matanza de todos los pasajeros, a fin de borrar su rastro. ¡Un día como cualquier otro en la vida de la doctora Boher!

La historia continúa en el Tomo 4, con La ballena de acero y Los hombres-pez.

No se indican los títulos originales. 1987. Ilaria Volpe [Mirka Martini] (guion) Magnus [Roberto Raviola] (ilustraciones). Necrón nº3. Ediciones La Cúpula.