PEDRUSCOS DEL ESPACIO

 ALMACÉN DE MUNDOS COMPRIMIDOS

                                           Presentado por… Wormy & Leechy.

 

Saludos, vertebrados.

Pedruscos del espacio es un reciclaje personal del Trivio 1000 de Falomir. Un intento de darle una nueva vida aprovechando al máximo el material original. De sacar el mayor partido posible al juego cambiando únicamente el reglamento, sin añadir ningún componente ajeno a los originales, y buscándole una nueva utilidad a sus elementos. 

En un intento de reaprovechar el tablero del Trivio 1000 (por el cual sentimos sincera admiración), presentamos aquí Pedruscos del Espacio (el título es provisional). Queremos dejar claro que la ilustración del tablero y las cartas pertenecen a Falomir y en ningún momento reclamamos ninguna clase de autoría o derechos sobre estos. Lo único que es nuestro es el reglamento alternativo propuesto.

En esta versión los jugadores no están en un átomo, sino en un planeta. Se da la feliz coincidencia que El planeta del espacio es rojo, como Marte (ya se ha comentado en alguna entrada del blog), está rodeado por un campo de asteroides (también lo pusimos en alguno de los posts del primer año) y ya no estamos muy seguros de ello, pero creemos que también en algún lado se indicó que el planeta tenía tres lunas. 

Eso hace a este tablero perfecto para ambientar un juego de mesa en El planeta del espacio, o más bien, en sus alrededores. Claro que podríamos dibujar nuestro propio tablero, imprimir nuestros propios elementos y desvincularlos totalmente de los que mostramos, pero la idea de este post es reciclar un juego completo, y este nos viene bastante bien.

Los jugadores representan en esta ocasión a mineros de los asteroides. ¡Sí, hemos reconvertido el Trivio 1000 en un juego de minería espacial! Esa es la grandeza de los juegos de mesa, la facilidad con la que se pueden modificar, ampliar, o adaptar para jugarlos de formas diferentes, o en combinación o secuencia con otros juegos. Este es un juego sencillo porque solo emplea los mismos elementos que venían en la caja del Trivio 1000, sin añadir nada. La idea es que quien tenga el Trivio 1000 disponga así de un segundo juego completamente diferente sin tener que adquirir nada que no tenga ya, tal como hicimos con La rebelión de los campesinos, que solo precisa una baraja española o de tarot normal y corriente, o el Kaijupoly, que recicla elementos de un Monopoly o similar.

Objetivo: el objetivo de los jugadores (los llamaremos Mineros a partir de ahora) es completar su cupo recolectando cierto valor total de minerales y exportándolos a otros mundos. Todos parten del Planeta del Espacio, el gran mundo rojo central, y se desplazan lanzando un solo dado.

Movimiento: se puede mover en cualquier dirección, pero hay que mover todos los puntos obtenidos en el dado y no se puede pasar dos veces en el mismo turno sobre la misma casilla. Cada una de las casillas pequeñas rojas, azules y amarillas es un asteroide del que pueden extraerse minerales de un tipo diferente. Cuando un Minero termina su turno sobre una de estas casillas, toma una carta del color adecuado. Se usan las cartas de preguntas, pero solo cuenta el reverso en el que se ve el color de la carta, que indica el tipo de mineral que carga su nave al pasar por ese asteroide. Es decir, si terminas tu turno sobre una casilla amarilla recibes una carta amarilla y te la quedas, e igual con los otros colores. 

Carga máxima: las naves de los Mineros (las piezas de juego) solo pueden almacenar diez cargas de mineral, por lo que un Minero que tenga ya acumuladas diez cartas no puede recolectar más, pero sí cambiar unas por otras si ello le conviene, ya que los minerales tienen diferente valor. Es decir, si el mineral amarillo es más valioso que los otros dos y un Minero cae sobre un asteroide amarillo puede tomar una carta de mineral amarillo, aunque ya tenga diez cartas acumuladas. Al hacerlo debe descartar una carta que ya tenga para seguir totalizando diez como máximo

Bolsa de valores: al inicio de la partida, antes que los Mineros despeguen del Planeta del Espacio, se lleva cabo una tirada de un dado por cada uno de los tipos de mineral, que marcará su Valor para la partida. Con un resultado de 1 a 3 en el dado, el Valor para el mineral de ese color es de un punto. Con un resultado de 4 o 5, su Valor es de dos puntos. Con un resultado de 6, su Valor es de tres puntos. El Valor de cada tipo de mineral debe anotarse en un papel para tenerlo claro en todo momento, porque puede cambiar durante el juego. Los Mineros no ganan estos puntos en el momento de recolectar el mineral, si no en el momento de enviarlo a otros mundos. 

Envíos desde las lunas: los cargamentos de minerales se envían a otros mundos desde instalaciones situadas en las tres lunas del planeta. Para hacerlo hay que llegar hasta una de las lunas (que muestran un triangulito blanco apuntando hacia el borde del tablero). En las lunas es posible detenerse voluntariamente aunque sobre puntuación en el dado. Alquilar un carguero auxiliar que se lleve el cargamento de minerales acumulados tiene un coste de dos puntos. El coste se descontará de lo que obtenga de ese envío (que deberá ser superior a dos). La carta o cartas de mineral son entonces embarcadas y enviadas a otros mundos, y el Minero se anota el valor en puntos obtenido. Todas las cartas son devueltas a sus mazos una vez canjeadas por puntos.

En la imagen de abajo, el Minero azul ha aterrizado en una de las lunas con cuatro remesas de mineral rojo, dos de mineral azul y una de mineral amarillo. Tras verificar el valor de las cartas, se descuenta dos puntos al total para financiar el envío. El valor del mineral se añade entonces a su total de puntos acumulado. Puesto que hay que pagar una cantidad fija por envío sin importar lo que se mande, conviene llenar la nave lo máximo posible para reducir los gastos al mínimo.

Vamos a suponer que las tiradas efectuadas al inicio de la partida establecieron un valor de dos puntos para el mineral rojo y de un punto para el azul y el amarillo. Este Minero, con cuatro remesas de mineral rojo (valor total de ocho puntos), dos azules y una amarilla (valor total de tres puntos), y unos gastos fijos de envío de dos puntos, obtendría (8+3-2=9) nueve puntos este turno.

El objetivo del juego es llegar a un cierto valor prefijado por los Mineros. Cincuenta puntos son una buena cantidad. Suena a mucho, pero en cuanto los Mineros empiezan a establecer sucursales en las estaciones, el ritmo de recolección se acelera enormemente.

Estaciones: los seis círculos verdes de mayor tamaño representan estaciones espaciales mineras. Las naves mineras pueden aterrizar en estas si terminan su movimiento es esa casilla, pero no pueden utilizar sus instalaciones sin establecer antes una sucursal en ellas. Para establecer una sucursal en una estación hay que pagar cuatro puntos de los que ya se tengan acumulados por haber realizado envíos desde las lunas. Si el Minero hace esto, toma el marcador de su color con el mismo número de la estación y lo deja a la vista en su lado de la mesa, como recordatorio de en qué estaciones tiene sucursales. 

En la imagen de abajo, el Minero de la ficha rosa ha caído en la estación nº1. Si establece una sucursal allí a cambio de cuatro puntos, toma la ficha de cartulina rosa con el número uno.

Cuando al mover se llega a una estación en la que ya se tiene una sucursal desde algún turno anterior, se pueden emplear sus instalaciones para recolectar minerales de los asteroides cercanos con mayor eficacia. Se lanza para ello un dado, pudiendo recolectar tantas cartas como la cifra obtenida. Estas cartas serán de los colores que correspondan a los asteroides más cercanos a esa Estación, siguiendo en orden una de las rutas posibles a escoger por el Minero. En la imagen de arriba, al volver a caer en la estación nº1 teniendo ya una sucursal en ella, lanzamos el dado. Si obtenemos, por ejemplo, un 4, recolectaremos cuatro cargas de mineral. Para determinar los colores de estas, elegiremos una de las rutas conectadas a esa estación. Si escogemos la indicada por la flecha rosa, tomaremos las cartas que nos corresponderían de haber caído en cada una de las cuatro casillas más cercanas a la estación siguiendo esa ruta, es decir, dos rojas, una amarilla y una azul. Cuando se hace esto, la nave del Minero no se desplaza de la estación.

Si además de esa estación, el Minero tiene una sucursal en otra estación que se conecte con la primera por una de las rutas, ambas se coordinan y en lugar de un dado se lanzan dos. 

En la imagen de arriba, el Minero rosa tiene sucursales tanto en la estación nº1 como en la nº2. Por tanto, al caer en cualquiera de ellas (en la nº2, en este caso) puede lanzar dos dados en lugar de uno, pero si hace esto tendrá que recolectar las cartas de la ruta superior (la indicada por la flecha rosa) o por el camino más corto también hacia la estación nº1. Puede tomar cualquier otra ruta, por ejemplo la que pasa junto al Planeta del Espacio y le lleva hacia la estación nº6, pero en este caso solo lanzaría un dado debido a que no tiene una sucursal en la estación nº6 con la que coordinarse. En los casos en los que se puede lanzar dos dados, suele ser mejor optar por el camino más largo, ya que en ningún caso puede recolectarse más de una carta de un asteroide por turno, y no puede seguir recolectándose mas allá de una estación. En caso de lanzar dos dados, obtener un ocho y optar por la ruta más corta de la estación nº2 a la nº1, solo recolectaría dos cartas de cada color.

Sucesos aleatorios: hay otra cosa a tener en cuenta. Cada vez que un Minero comienza su turno en una estación, debe lanzar dos dados en la siguiente tabla para comprobar si ocurre algo inusual durante su estancia. Debe hacer esto tanto si tiene una sucursal en esa Estación como si no, y el efecto se resuelve antes de llevar a cabo su tirada normal de movimiento. No se puede elegir no moverse de la estación cuando se comienza el turno en una.

2-4. Sin novedad: otro aburrido día en la estación.

5. Transportistas autónomos: en la estación hay en ese momento una nave de transporte autónoma. Se la puede contratar por 3 puntos para que lleve la carga del Minero hasta otro mundo prescindiendo de las instalaciones lunares. Si el Minero hace esto, cambia su carga de mineral actual por puntos como si hiciera el envío desde una luna, pagando 3 puntos en lugar de 2.

6. ¿Dónde está el piloto?: algún miembro clave de la tripulación no se ha presentado a la hora del despegue. Probablemente esté durmiendo la mona en algún rincón de la estación. El Minero y su tripulación pierden todo el turno buscándolo y no pueden hacer nada más. En su siguiente turno realiza como de costumbre una tirada en esta tabla antes de abandonar la estación ¡Puede que se eche en falta a alguien más!

7. Nivel de pureza alto: tras refinar el mineral recolectado recientemente, uno de los cargamentos resulta tener un nivel de pureza muy elevado. El Minero toma  dos cartas adicionales mineral de un color que ya tenga almacenado para representar su mayor valor.

8. Reparación y mantenimiento: la nave del Minero debe regresar al Planeta del Espacio para reparar alguna avería importante o para labores de mantenimiento generales. Hasta que regrese al mundo central y vuelva a despegar de allí al turno siguiente, no puede recolectar mineral en los asteroides ni estaciones, ni puede realizar envíos desde las lunas. El mundo central y las lunas son las únicas casillas en la que es posible detenerse voluntariamente aun sobrando conteo en el dado. En caso de no querer detenerse en el planeta este no cuenta como casilla y simplemente se salta.

9. ¡Piratas!: una nave pirata está al acecho y empieza a perseguir a la nave minera para robarle la carga. Lo habitual en estos casos es eyectar la mitad de los contenedores de carga y huir con la otra mitad. Los piratas abandonan la persecución para recuperar los contenedores abandonados. El Minero cuenta sus cartas de mineral, las baraja, y descarta la mitad (o la mitad menos una, si es una cifra impar) con los ojos cerrados. 

10. Bolsa de Valores: el precio de los minerales fluctúa. Recalcula el valor en puntos de cada tipo de mineral tal como se hizo al inicio de la partida. El cambio de valor es inmediato y se mantiene hasta que se obtenga de nuevo este resultado. No afecta a los puntos que los Mineros ya han obtenido por enviar cargamentos de mineral anteriormente, pero sí al valor del mineral ya recogido pendiente de enviar.

11-12. Cerrado por vacaciones: la estación cierra por vacaciones. Mientras la estación esté cerrada no es posible usar sus instalaciones para recolectar, ni establecer allí una nueva sucursal. A todos los efectos la estación es una casilla neutra, y por tanto tampoco puede coordinarse con otras estaciones para una recolecta doble. Las estaciones se alternan entre ellas de forma que nunca hay más de una cerrada por vacaciones, por lo que cuando se obtenga este mismo resultado en otra estación diferente, la última que cerró retoma inmediatamente su actividad. Cuando una estación cierra puede colocarse sobre esta una ficha de sucursal que no se esté usando, mostrando el lado gris, para recordar a todos que la estación está cerrada. Si todas las fichas de sucursal ya están reclamadas, el mismo Minero que obtuvo este resultado coloca su ficha de sucursal correspondiente a esa estación sobre ella mostrando el lado gris, y la recupera cuando la estación reabre.

En la foto de arriba la estación nº5 está cerrada por vacaciones. El Minero amarillo no puede recolectar mineral, pero en su siguiente turno, antes de abandonar la estación deberá hacer una tirada en la tabla correspondiente para comprobar si ocurre algo mientras está en ella. Si el Minero rosa se desplazara hasta estación nº6, no podría coordinar una recolecta doble de mineral entre la nº6 y la nº5 aunque tuviera sucursales en ambas, al no estar activa la nº5. 

Esta sería la mecánica básica, pero como todos los juegos de mesa, se puede extender y ampliar cuanto se desee. 

Si quieres probar este juego en casa, puedes descargar una copia del reglamento en PDF pulsando aquí.