¡ALERTA DE EXPOILERZ!
Un joven científico recibe la
consabida herencia con bicho consistente en una gran mansión familiar, una
jugosa renta vitalicia, y una maldición que impulsó a tres de sus antepasados a
embarcarse en una orgía de asesinatos sin sentido.
Los crímenes los llevaron a cabo tres
hombres nacidos un dos de febrero, justo el día de su trigésimo cumpleaños,
estando viviendo en la mansión, y con un siglo exacto de diferencia de unos asesinatos a los siguientes. Demasiado preciso para ser coincidencias. Naturalmente, el joven heredero nació
también un dos de febrero, le faltan pocos días para que cumpla treinta años,
y cuando esto ocurra habrán transcurrido exactamente cien desde que se
cometieron los últimos crímenes.
La historia no está mal contada ni mal
planteada, pero tiene un problema. Básicamente, no ocurre nada relevante entre
el inicio y el final. Nos relata principalmente los diversos intentos del
protagonista (que en realidad es un verdadero tipejo, borrachuzo e impertinente)
de llevarse al catre a la hija del tabernero del pueblo cercano, o a su propia
prima (tanto le da una que otra), que también ha acudido a la mansión a por su
tajada de la herencia.
Hay una subtrama de investigación sobre
un cuadro desaparecido que parece que va a tener relevancia en la historia,
pero al final no la tiene. Se le da también muchas vueltas al estudio de
antiguos documentos, informes sobre los asesinatos cometidos por sus antepasados,
su genealogía, algunas charlas pseudocientíficas sobre la predisposición
genética al crimen… pero no hacen más que redundar sobre lo que se nos había
contado ya al comienzo, o aportar con cuentagotas algo de información adicional
poco importante.
El final es tramposo y confuso, y
tampoco aclara gran cosa, no dándonos ningún motivo o explicación sobre el
origen de esa supuesta maldición, que no llegamos a saber si es real o no. Lo mínimo que uno espera encontrar en estos
bolsilibros de terror son unos cuantos asesinatos repartidos a lo largo del
texto para amenizar el cotarro, pero ni eso.
Sí es cierto que a medida que la
fatal fecha del cumpleaños se acerca todos los personajes van volviéndose más y
más paranoicos, y se logra una cierta tensión, pero en general se me ha hecho
una lectura bastante pesada. Y eso que yo, en lo que a este tipo de libritos se refiere, soy fácil de conformar.
Al cumplirse el tercer siglo. 1976. Frank Mc Fair [Francisco
Cortés Rubio]. EASA Terror nº 41. Editorial Andina S.A.
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