EL TEMPLO DE LOS PERGAMINOS
¡ALERTA DE EXPOILERZ!
¡ALERTA DE EXPOILERZ!
Presentado por… el profesor Plot.
Saludos, ávidos lectores.
Segunda aventura de los librojuegos de D&D
de la serie negra, y también una de mis preferidas. En ella tomamos el papel
de Landon, un joven elfo de Aralia, una aldea situada en unas montañas coronadas de nieves perpétuas. Lo más crudo del invierno se acerca, y en
esa época la aldea depende más que nunca de las caravanas de comerciantes. Pero
estas llevan meses interrumpidas. Se han enviado varios guerreros a investigar que
está impidiendo que las caravanas lleguen a Aralia, y ninguno de
ellos ha regresado.
El consejo de la aldea decide hacer un
ultimo intento, enviando un guerrero más (a Landon), otorgándole la
custodia de La Espada del Mago, un arma mágica indestructible capaz de emitir
luz y detectar la presencia de enemigos. Con La Espada del Mago, un mínimo de
equipo y provisiones, y la única compañía de una simpática mula, nos internamos
en la misma senda de las caravanas en la que han desparecido todos los enviados
anteriores.
Tras rescatar a un elfo moribundo de las garras de unos ogros, este
nos informa que todo el problema tiene su origen en Shanafria, la llamada Montaña
de los Espejos. Un gran contingente de orcos, trasgos y ogros se han ido
reuniendo en su interior. Son ellos los que han atacado las caravanas. Los monstruos
han descubierto una mina de diamantes en el interior de la montaña, y están capturando
y esclavizando a los viajeros para trabajar en ella.
Los dirige un gigante de los hielos, personaje
realmente despreciable, que tiene como mascota a una cría de dragón blanco llamada
Colmillo a la que no cesa de gritar y golpear. El gigante es un enemigo
demasiado poderoso para enfrentarnos a él, por lo que siempre debemos evitarlo.
Pero cada aparición del gigante viene acompañada de una nueva escena de
maltrato draconil que termina con el pobre Colmillo llorando a lagrima viva
mientras el gigante lo patea.
En nuestro deambular por el interior de
Shanafria nos encontraremos con unos pequeños elementales de hielo
llamados Guardianes. Ellos son los habitantes originales de Shanafria, los que
crearon toda la vasta red de túneles y cavernas que los monstruos simplemente
han ocupado. Los Guardianes nos hacen entrega del Espejo de las Almas, una joya
mágica que nos permitirá, situándola en el lugar adecuado, destruir todo el
interior de la montaña. Los Guardianes están dispuestos a sacrificar su propio
mundo con tal de aniquilar el mal que se ha instalado en él. Son tan eternos
como el hielo de las montañas, y pueden dedicar siglos a reconstruirlo una vez
los monstruos hayan desaparecido.
Armados con este peligroso artefacto y con la ayuda de algunos prisioneros que logramos rescatar (y un presumido lince que
encontramos en un bosque de setas subterráneo) tendremos que abrirnos camino
hasta el punto exacto en el que debemos situar El Espejo de las Almas para que
libere su poder… y luego tratar de sobrevivir a sus devastadores efectos.
Una aventura mejor estructurada que la
anterior y con bastantes detalles curiosos, como una puerta de hielo parlante o
el propio lince, que se vuelve invisible a ratos para burlarse de los orcos. Lo
único que se le puede reprochar es que no exista la posibilidad de acabar con
el odioso gigante, ni saber que pasa con él y con Colmillo una vez todo el
interior de Shanafria es destruido. No hubiera estado de mas encontrarnos al
gigante aplastado por un enorme bloque de hielo y al dragón alejándose tranquilamente
de la montaña devastada.
Mountain of Mirrors. 1982. Rose
Estes (texto) Larry Elmore (portada) Jim Holloway (ilustraciones). D&D
Aventura sin fin nº 2. Publicado en 1985 por Timun Mas.
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