EL TEMPLO DE LOS PERGAMINOS ¡ALERTA DE EXPOILERZ!
Saludos, ávidos lectores.
Compré este comic porque se anunciaba como una miniserie de cuatro números, pero en realidad es una historia larga de dieciséis números que se continúan directamente los unos a los otros. Se vendió como cuatro miniseries separadas quizá con la intención de conseguir lo que lograron conmigo: hacerme creer que solo necesitaría comprar cuatro números para tener una historia completa.
Objetivos secundarios es al parecer la segunda de esas cuatro miniseries que en realidad son como cuatro capítulos o partes de lo que desde el principio, y siendo honesta, la editorial debería haber vendido (o como mínimo anunciado) como una sola serie. Y esto para mí ya es empezar mal, porque no se trata de miniseries totalmente independientes pero relacionadas como ocurre, por ejemplo, con las diversas miniseries de Predator ya comentadas, en cuyo caso venderlas por separado sí tendría sentido. Es una sola historia, pero en ningún lado se indica que estos comics, marcados en portada como el 1, 2, 3 y 4 de un total de 4, son en realidad el 5, 6, 7 y 8 de un total de 16.
La historia comienza en la guerra del futuro de los humanos contra las máquinas. Cuatro terminators son enviados al pasado para eliminar a Sarah Connor. Uno de esos modelos es especial, llevando la numeración 000 a pesar que en varias ocasiones se indica que es un modelo 800. No parece superior al resto de 800 salvo por el hecho de tener una mayor iniciativa e inventiva, como resultado de una programación más avanzada. El comic es de octubre de 1991, solo dos meses anterior al estreno de Terminator 2, y no se hace ninguna referencia a los modelos 1000 de metal líquido.
De estos cuatro terminators que se nos dice que son enviados al pasado, solo dos intervienen en la historia. Imagino que los otros dos aparecieron en los números anteriores o aparecerán en los posteriores a los cuatro de esta mal llamada miniserie. Los dos que toman parte en Objetivos Secundarios son C890L y Z000M.
En el pasado (el presente para nosotros) C890L está aparentemente solo, en Los Ángeles. Ataca una guarida de narcotraficantes para apoderarse de su arsenal. La matanza de narcos que organiza en plena ciudad hace intervenir a la policía. El modelo C890L arremete contra ellos también, considerando una amenaza y objetivo potencial a cualquiera que esté armado. Tras matar a toda la banda de narcos y a medio centenar de policías se retira, únicamente por ahorrar municiones. Para ese momento toda su cubierta orgánica se ha quemado y desprendido en una explosión, dejándolo reducido al esqueleto metálico.
Las imágenes de la desesperada lucha de la policía contra el extraño atacante son transmitidas en directo por un cámara de televisión, y vistas por tres individuos que se ocultan en un piso: Mary, Astin e I825M. Estos personajes vienen de los números anteriores. Mary es una soldado de la guerra del futuro enviada al pasado para defender a Sarah Connor de los terminators, y Astin es un nativo de ese tiempo que trabajó como técnico o programador en Cyberdyne Systems.
I825M parece un modelo 800 típico pero es en realidad un ser humano modificado con implantes cibernéticos. En lugar de un robot cubierto de materia orgánica sintética, es un humano natural capturado vivo por los terminators al que “rellenaron” de mecanismos, incluso en el cerebro, de forma que actuara también como un terminator. Al contrario que los otros modelos 800, sus heridas se curan y cicatrizan de forma natural ya que su tejido orgánico está realmente vivo. Esto le permite pasar desapercibido más fácilmente a largo plazo, pero a cambio sigue necesitando comer y dormir.
Es posible que I825M fuera uno de los otros dos terminators que se nos dice al principio que fueron enviados al pasado. Al parecer, I825M fue derrotado por Mary y reprogramado por Astin, por lo que ahora lucha por los humanos. Mary e I825M no tienen medios para volver a su época, pero comparado con el desolado infierno en el que vivían, el siglo XX es un paraíso al que no les ha costado nada adaptarse.
Astin se quita de en medio rápidamente. Su intervención en el resto de la historia es tan reducida que no volveremos a nombrarlo en esta reseña, hasta el final. Los protagonistas son Mary e I825M, que al descubrir que hay más terminators en esa época (al parecer no sabían nada de C890L y Z000M hasta ese momento) deciden ir en busca de Sarah Connor para protegerla.
Aquí se nos indica que todos los terminators en una misma fecha están conectados entre ellos, de forma que pueden geolocalizarse, coordinarse y compartir datos. Esto permite a I825M saber hacia donde se va desplazando C890L, y emplear esta información para mantenerse cerca de él pero sin llegar a encontrárselo. I825M está fabricando un arma con la que espera desactivarlo de un solo disparo, pero al estar empleando la primitiva tecnología del presente, su trabajo avanza con lentitud. La forma en que esta conexión entre terminators funciona no está muy clara, porque I825M y Z000M no parecen detectarse entre ellos e I825M puede negarle a C890L el geolocalizarle, pero no al revés.
Unos y otros van moviéndose hacia México en busca del ultimo refugio de Sarah Connor, y terminan encontrándose. Mary e I825M se enfrentan a C890L y lo desactivan con el arma fabricada por I825M, que ha logrado ponerla a punto a contrarreloj y está sin probar. A continuación reprograman al terminator y lo dejan como trampa para cuando llegue Z000M. El combate entre estos dos terminators, a lo largo del cual van arrasando calles y masacrando policías y militares, termina con Z000M destruida y C890L partido en dos. Sin embargo, los daños recibidos revierten su reprogramación. Lo que queda de C890L retoma su objetivo anterior de eliminar a Sarah Connor, y se nos da a entender que emplea las piezas intactas de Z000M para reconstruirse y continuar su misión.
Entretanto, Mary y 1825M encuentran el escondrijo de Sarah Connor, pero está abandonado desde hace mucho. Sin ninguna pista que seguir, se reúnen de nuevo con Astin, y hasta aquí llegan estos cuatro números.
La verdad es que la historia me ha dejado un poco frio. El dibujo está bastante bien y tiene momentos interesantes, como una serie de ataques que 1825M sufre regularmente en los que su programación ciborg se enfrenta a su mente humana tratando de arrebatarle el control de sus actos, o una ocasión en la que sueña que tiene sexo con Mary, mostrando que sigue siendo más humano que terminator. Pero en general se nota que lleva relleno para alargar la historia.
El cuarto numero es casi de principio a fin el combate entre el C890L reprogramado y Z000M, incluyendo una viñeta que ocupa dos páginas completas en la que solo vemos una explosión, sin texto narrativo siquiera. Y creo que dibujar una explosión más grande no la hace más espectacular. Una explosión que llene toda la pantalla puede funcionar en una película, pero dedicar dos de las veinticuatro páginas de un comic a mostrar una explosión me parece simple vagancia por parte del dibujante.
En fin, no siempre se acierta con las compras 🤖
Terminator: secondary objectives. 1992. James Robinson (guion) Paul Gulacy (dibujo). Dark Horse Comics. Publicado por Norma Editorial.
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