EL ORÁCULO DE LAS VISIONES ¡ALERTA DE EXPOILERZ!
¡Hola, amigos cinéfagos!
He de decir que pocas películas francesas he visto que me hayan gustado, porque incluso las de acción tienden a parecerme muy lentas. De esta no esperaba gran cosa. La empecé a ver pensando que sería otra más de acción y tiroteo del montón, como mucho entretenida, pero me equivocaba.
Es, efectivamente, una colección de tiros y muertes, pero la situación que nos presenta es agobiante y desemboca en un combate sin cuartel bastante dinámico en el que los protagonistas están a todas luces abocados al fracaso.
La historia comienza con un grupo de ladrones colándose de noche en un almacén de equipos informáticos a las afueras de la ciudad de Estrasburgo (Francia). No son unos rateros vulgares: están bien organizados, su golpe está razonablemente planeado, cuentan con algunas armas de fuego, y la mayoría de ellos no parecen tener demasiados reparos en usarlas.
Su intención es llenar su camión de cajas y cajas de ordenadores portátiles nuevos para venderlos por su cuenta en el mercado negro. Robar portátiles es menos problemático que robar directamente dinero, y son más fáciles de colocar que joyas o artículos de lujo. Pero esa buena organización y planificación va a jugar en su contra más adelante.
Paralelamente a esto, un comando de élite está transportando en un furgón blindado al líder de una peligrosa banda de mafiosos albaneses que se dedica al tráfico de armas. Su principal fuente de ingresos, no obstante, es su extensa red de prostitución, que mantiene reducidas a la esclavitud y marcadas al fuego como ganado a miles de mujeres. Los sicarios son fanáticos que están dispuestos a morir (y por descontado, a matar) por su líder.
El convoy blindado es interceptado por cerca de un centenar de sicarios con armamento y entrenamiento militar que se han infiltrado en el país para liberar a su líder. Tras el ataque inicial de los terroristas, un reducido grupo de soldados supervivientes logran refugiarse en un polígono industrial llevando con ellos a su prisionero.
Es el mismo polígono en el que los ladrones están todavía cargando cajas en su camión, tras haber reducido a los dos guardias de seguridad del complejo.
Como parte de su plan han saboteado la antena telefónica repetidora que provee de cobertura a la zona en la que se encuentra el almacén, por lo que los teléfonos móviles no funcionan en el área. Esto debía reducir las posibilidades de que alguno de los guardias diera la voz de alarma, pero ahora les impide a ellos y a los militares solicitar ayuda.
También han hecho coincidir el robo con una fiesta nacional en la que los fuegos artificiales forman parte de la celebración, para que cualquier disparo que se produzca pueda ser confundido por quien lo oiga como parte de la pirotecnia.
Al quedar el polígono rodeado por los sicarios, el pequeño grupo de militares, ladrones y guardias tendrán que unir sus fuerzas a regañadientes para convertir su almacén en un nido de avispas; un lugar en el que sea imposible adentrarse sin sufrir daño. A su favor cuentan con que tienen algún tiempo para mover los enormes contenedores de carga con las grúas del almacén formando muros y barricadas dentro del local. En su contra, sus enemigos les superan en diez a uno y son asesinos fanáticos con el cerebro lavado.
Una vez esta situación queda establecida, el resto es una batalla sin concesiones entre ambos grupos, con los sitiados perdiendo terreno y hombres sin cesar ante los sitiadores, replegándose cada vez más al interior del local mientras hacen pagar cara cada baja sufrida y cada metro retrocedido. Saben que carecen de potencia de fuego suficiente para vencer a sus atacantes, pero la noche avanza y cada minuto que resisten es una nueva oportunidad de que los refuerzos enviados al perder el contacto con el convoy les localicen.
En cierto modo, a partir de la primera mitad recuerda un tanto a algo a medio camino entre Zulú y Asalto a la comisaría del distrito 13.
Así que básicamente es solo una película de tiros, pero dentro de este género (como en cualquier otro) hay historias buenas y malas, y esta es de las buenas. Cuando se estrenó se criticó mucho su argumento simplista y el exceso de muertes y tiroteos. Encuentro esto especialmente absurdo si consideramos que una película de acción debe sostenerse precisamente a base de acción, no de largos diálogos o argumentos enrevesados, pero incluso la gente que no sabe lo que está viendo debe tener derecho a opinar sobre ello🤷♂️
Nid de Guêpes. 2002. Florent-Emilio Siri, Jean-Francois Tarnowski (guion) Namy Naceri, Bendit Magimel, Pascal Greggory (actores principales) Nadia Fares, Sami Bouajila (actrices principales). Editado en DVD por Tripictures.
Hay muy buenas películas de cine francés. Te recomiendo:” Bronx, “película policiaca. En comedia los franceses hacen muy buen cine también, si puedes ve “Se nos fue de las manos”. Nido de avispas, está bien…no es “El beso del dragón” pero entretenida, aunque es la típica película de asalto al fuerte
ResponderEliminarNo dudo que haya películas francesas excelentes, aunque por el momento no he visto ninguna que a mi gusto lo sea. "Amelie" por ejemplo está considerada una de las mejores películas del cine francés y a mí me pareció simplemente entretenida.
EliminarDe las tres que nombras solo he visto la de "El beso del dragón". Encontré interesante el tema de la ´acupuntura de combate´. Es una película entretenida pero para verla una vez en la vida. Me gustó bastante menos que esta de "Nido de avispas". El tema del asalto al fuerte ya está muy gastado, cierto, y es precisamente el haber hecho algo llamativo a partir de una premisa tan poco original le da a mi entender más merito.
Las otras dos que recomiendas me las apunto por si puedo echarles un ojo.