¡ALERTA DE EXPOILERZ!
A estas alturas es poco lo que se pueda contar sobre la película Alien, el octavo pasajero que no se haya dicho ya, así que comentaremos una de sus predecesoras más directas.
La historia de IT! The terror from beyond space tiene lugar en el futuro, concretamente en el año 1973. Vale la pena aclarar que la película se estrenó en 1958 y, por aquellas fechas, y al ritmo al que se sucedían las noticias sobre los avances de la exploración espacial, a la población en general le parecía factible poder enviar un cohete tripulado a Marte en unos diez o quince años. Esta película especulaba sobre lo que se podría encontrar allí.
El metraje está lleno de explicaciones científicas para darle un mayor ambiente de ciencia ficción, pero luego vemos que a bordo no hay nada asegurado al suelo. Sillas, mesas, cajas de suministros... todo son objetos comunes que simplemente están colocados a bordo sin preocuparse por cosas como la ingravidez o las fuerzas de aceleración. La gente quería ver "cosas del espacio" y no se preocupaba por los detalles técnicos, muchos de los cuales nos pueden parecer evidentes hoy en día, pero en aquel entonces todavía no habían pasado a formar parte del conocimiento colectivo.
La historia es la siguiente; una nave de la Tierra aterriza en Marte con la intención de socorrer a su predecesora, con la que se ha perdido el contacto. Encuentra un solo superviviente, que además parece haber enloquecido. Toda la tripulación de la primera nave ha sido asesinada, y el superviviente lo achaca a una monstruosa criatura de más de dos metros de alto, jamás observada anteriormente por la humanidad.
Nadie le cree, puesto que en la atmósfera casi
sin oxígeno ni humedad de Marte ningún ser de esas dimensiones podría
existir. De hecho, la tripulación de la segunda nave inmediatamente sospecha
del superviviente de la primera como responsable de la muerte de sus
compañeros.
Durante el viaje
de regreso a la Tierra descubren que un ser cuya mera existencia parece
científicamente imposible se ha colado a bordo de la nave, y que está dispuesto
a matarlos a todos uno por uno. La criatura ataca a los tripulantes y los arrastra a los conductos de ventilación para drenar toda el agua, sangre y medula espinal de sus cuerpos.
Con un monstruo asesino de más de dos metros suelto por la nave (por cierto, al actor que hacía de monstruo el traje le quedaba pequeño porque él mismo era enorme) los tripulantes no tienen más remedio que tratar de acabar con él a su vez. Pero el monstruo demuestra ser muy resistente a las armas convencionales. Se mueve además por los conductos del aire, siendo muy difícil predecir donde aparecerá la siguiente vez que se decida a atacar.
Tras varios
intentos infructuosos de matarlo, los supervivientes deciden ir
dirigiéndolo a través de esos mismos conductos por los que se desplaza hasta
llevarlo a un punto en el que puedan lanzarlo al espacio o dejarlo aislado en
un área que puedan descomprimir para asfixiarlo. El monstruo parece necesitar oxígeno
para respirar, y aunque en Marte dispusiera de muy poco, una vez a bordo de la
nave lo consume en cantidades tan enormes que amenaza con sofocar a la
tripulación y matarlos a todos por falta de aire.
Para lo que se
sabía en 1958 sobre el espacio (el público en general, no la gente que se
dedicaba a eso), la película está bastante bien. Las naves espaciales eran el
máximo exponente de la tecnología, y el público no veía nada raro en que los
protagonistas disparasen pistolas, ametralladoras, e incluso bazucas en el
interior de una (¡algo capaz de viajar por el espacio debía ser
muy sólido!). Seguimos viendo tiroteos y explosiones a bordo de las naves a día
de hoy en películas de ciencia ficción y nadie se lleva las manos
a la cabeza ni clama al cielo pidiendo más realismo, porque en el fondo,
seguimos queriendo que nos enseñen "cosas del espacio" y no una
lección de ingeniería o seguridad operativa.
Cuando se
estrenó, a modo de gancho publicitario, la productora ofreció una recompensa de 50.000 dólares (que era muchísimo más
dinero en los 50-60 del que pueda suponer ahora) a cualquiera que demostrara
que en Marte no existían criaturas similares a las descritas en su película. Nadie la
reclamó. Es más... ¿podría alguien reclamarla ahora, con lo poco que conocemos todavía sobre ese planeta, sin haber explorado siquiera sus
cavernas o subsuelo?
Puedes ver otra película relacionada con Alien pulsando aquí.
It! The Terror From Beyond Space. 1958. Jerome Bixby (guion) Edward L. Cahn (director) Marshal Thompson, Kim Spalding (actores principales) Shirles Patterson (actriz principal). United Artist. Editada en DVD en 2010 por L´ateleir 13 Pictures.
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