¡ALERTA DE EXPOILERZ!
Presentado por… el profesor
Plot.
Saludos, incansables pasapáginas.
La máscara viene acompañada de una nota en la que nos avisa que, según las creencias de la tribu, quien se la pone se convierte mosca. Y naturalmente…
…si,
naturalmente nos la ponemos. ¿Qué crío no lo haría? Nos probamos la máscara y
al día siguiente, al despertarnos, ya somos una mosca. Nuestra cabeza sigue
siendo humana, una versión reducida de nuestra propia cabeza, adaptada a las dimensiones de nuestro nuevo cuerpo.
A
partir de ahí, tendremos que buscar la forma de recuperar nuestro aspecto
humano, mientras evitamos que la gente nos aplaste de un manotazo o se nos coma
una araña. Los instintos de la mosca que casi somos nos van dominando cada vez más. Y si cedemos a ellos nos arriesgamos a convertirnos no solo físicamente, sino también mentalmente, en mosca.
Es
un librojuego bastante divertido por la forma en que se describen nuestras
vicisitudes como mosca, y no es muy letal, comparado con otros librojuegos
similares. De los únicamente siete finales posibles, solo en tres terminamos
muertos o convertidos en mosca para siempre. En los otros cuatro logramos
recuperar totalmente (o casi totalmente…) nuestra forma humana.
Uno
de los finales buenos es especialmente embarazoso. Recuperamos la forma humana
mientras (como mosca) nos estábamos dando un banquete en una fuente de macarrones con queso, en la
cocina de un hospital. Y aparecemos ante las cocineras desnudo, revolcándonos
en la bandeja, y cubierto de queso fundido y macarrones. ¡Bueno! ¡Mejor eso que seguir
siendo una mosca! Creo.
Como
autores, aparecen Laban Carrick Hill en la portada y
R.A. Montgomery en el interior. Puede que el libro fuera escrito por uno de
ellos sobre una idea base del otro, pero esto no se aclara.
Puedes ver otro librojuego de esta colección pulsando aquí.
Bugged out! 1996. Laban Carrick Hill / R.A. Montgomery (texto) Bill Schmidt
(ilustraciones). Elige tu propio escalofrió nº 3. Editado en 1997 por Timun Mas
/ Grupo Editorial CEAC.
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