EL GRAN BAZAR
Saludos, viajeros.
Aprovechando que estamos en pleno 2021, El Año del Buey según el calendario chino (y quien dice buey, dice vaca), quiero mostraros algo que guardo como recuerdo de un episodio especialmente vacuno de mi vida. Forman parte de mi colección (se podrían considerar recortables) así que su presencia en el blog es legítima después de todo.
Todo este montón
de vacas están recortadas de briks de leche. No recuerdo con seguridad la
marca, pero creo que era Muuu (un nombre realmente acertado, en mi opinión, para una marca de leche de
vaca).
Durante una
navegación especialmente tensa de cuatro meses por aguas de Somalia, en parte
por centrar la mente en otra cosa y en parte porque echaba de menos mis
colecciones de juguetes, un compañero y yo nos dedicamos a recortar estas vacas
de los briks de leche que se iban vaciando (cerca de una decena al día, era una
tripulación grande) dejando una parte debajo que pudiera doblarse como un
plantador.
Cuando
acumulamos un par de centenares de ellas, dedicamos una noche a repartirlas por
todo el barco. En un barco la actividad no cesa nunca, pero los turnos nocturnos suelen ser algo más tranquilos, con menos tránsito de gente. Mesas, repisas, equipos, ordenadores, literas… Algunas encajadas
en las ranuras de los mamparos. Otras sujetas con
cinta adhesiva para que el balanceo de las olas no las derribara, o con una tuerca haciendo peso sobre la solapa
para mantenerla en su sitio. El puente de gobierno amaneció particularmente lleno
de vacas.
La gente se lo
tomó bastante bien y durante un par de días no se hablaba más que de lo que alguien terminó por llamar "la vacabunta" (haciendo referencia a la película Cuando ruje la marabunta). A veces hay que mantener la mente llena de vacas, para que no quede
mucho sitio para las preocupaciones. Sobre todo cuando te pasas cuatro meses
navegando por las que estan consideradas como entre las aguas más peligrosas del mundo, lejos de todas las personas y
cosas que quieres.
Conservé estas como recuerdo, incluyendo una vaca "personalizada" pintada como la de Milka. In cow we trust.
Oye, que idea tan particular tuvisteis tu compañero y tu llenando un barco militar de vacas, especialmente en una navegación que no podía llamararse " tranquila "
ResponderEliminarMe puedo imaginar la cara que pondría toda la tripulación al ver semejantes polizontes.
Aplaudo la idea que tuvisteis.
Seguro que los mandos superiores también estarian divertidos aunque por diversas circunstancias quizás se mantuvieran "impérritos" como corresponde a su cargo.
Una buena historia para recordar.
Alguno que otro hubo que lo consideró "indigno" o "inadecuado" pero en general todo el mundo se lo tomó con buen humor. En navegaciones largas, cualquier cosa que quite tensión a la tripulación sin mermar el rendimiento del barco suele verse bien.
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