EL JUEGO DE LA OCA (¿1960?)

 ALMACÉN DE MUNDOS COMPRIMIDOS

                                           Presentado por… Wormy & Leechy.

 

Saludos, vertebrados.

En nuestra última incursión de mercadillos encontramos un bonito tablero de La Oca, juego por el que sentimos una extraña fascinación. Es solo el tablero, sin instrucciones ni caja. Es probable que nunca las tuviera y el tablero se vendió suelto, tal cual.

Al no tener instrucciones no sabemos el efecto de las casillas, aunque estos suelen ser bastante comunes. Los efectos de las casillas de Oca, Puente y Muerte suelen ser los mismos. Los de Dados, Posada, Pozo y Laberinto tienden a variar más. Vemos que las casillas especiales son también las estándar.

Oca (casillas 5, 9, 14, 18, 23, 27, 32, 36, 41, 45, 50, 54, 59, y 63). Son dibujos de ocas realistas, haciendo típicas cosas de oca. 

En algunos tableros aparece una casilla de ocas dobles (en la que se ven dos o a veces más ocas juntas) y/o una de oca falsa (en la que aparece una oca, pato o cisne que a primera vista podría confundirse con una casilla de oca pero no cuenta como tal). En este tablero no hay oca falsa, pero tenemos tres casillas de oca doble, la 18, la 36 y la 59, sin contar las casillas de salida y llegada, en la que es habitual la presencia de varias ocas. 

Puente (casillas 6 y 12). Aquí llama la atención que los puentes sean muy diferentes, uno antiguo, de piedra, casi derruido, y otro moderno de acero. Generalmente los dos puentes son parecidos, usándose muchas veces la misma ilustración para ambos.

Posada (casilla 19). En la puerta de la posada vemos al cocinero despidiéndose de unos clientes que se marchan.

Dados (casillas 25 y 53). Los habituales dibujos de dados, con y sin cubilete.

Pozo (casilla 31). Un pozo de piedra clásico.

Laberinto (casilla 42). El laberinto es un dibujo esquemático como el que suele aparecer en los libros de pasatiempos. A un lado del laberinto, una oca se pregunta por donde debería ir.

Cárcel (casilla 52). Vista desde dentro, con rata incluida como compañera de celda.

Muerte (casilla 58). El habitual cráneo con huesos cruzados.

Al carecer de fecha impresa, logo, marca, instrucciones o firma, no tenemos ningún dato sobre el tablero. Afortunadamente, la costumbre de ilustrar todas las casillas de La Oca, incluso las que no tienen efecto, permite calcular su año de aparición. Los ilustradores debían llenar con algo todas esas casillas sin efecto, y solían hacerlo con una mezcla de temas clásicos y otros de moda.

El estilo del dibujo es antiguo, propio de los 50-70, así como que el tablero esté enmarcado con tachuelas en lugar de con grapas o pegado. En la casilla 30 una chica hace girar un Hula Hoop en torno a su cintura. Este juguete se comercializó de forma masiva en 1960, y su popularidad decayó hasta prácticamente desaparecer en los 80. En la casilla 44 vemos también un Volkswagen Escarabajo descapotable. Los Escarabajo se fabricaron entre los años 1938 y 1978, y hubo modelos descapotables a partir de 1945.

Valiéndose de un concienzudo análisis de tres de las ilustraciones del tablero, el hermano mayor de nuestro Supervisor General, ducho en deportes, ha afinado la fecha hasta situarla aproximadamente en 1960.

En las casillas 15 y 47 vemos las ilustraciones de un futbolista y un ciclista que parecen caricaturas de, respectivamente, Ladislao Kubala y Federico Martín Bahamontes. Kubala jugó en el Barcelona entre 1950 y 1962, siendo la estrella del equipo en su época. Martín ganó el Tour de Francia en 1959, por lo que fue un personaje muy conocido ese año.

En la casilla 61 vemos otro futbolista, que parece representar a Alfredo di Stefano. Su hoyuelo de la barbilla es muy característico. Fue la estrella del Real Madrid entre 1953 y 1964. Estos tres personajes fueron extremadamente populares un poco antes o después de 1960, por lo que podemos dar esta como la fecha de aparición más probable de este tablero, un año arriba o abajo.

Por otra parte, y sin relación con la fecha, la casilla de Inicio muestra a un bufón disponiéndose a emprender el camino mientras juguetea con unos dados. Recuerda mucho a una de las ilustraciones de un libro que el profesor Plot reseñó hace poco, El club Dumas, en la que un bufón se dispone a entrar en un laberinto (El Laberinto, otro de los elementos clásicos del Juego de la Oca) y a su lado hay tres dados cuyas caras visibles suman seis en todos los casos. ¿666? 

Esto nos ha recordado a su vez una regla que aparece en algunas versiones de La Oca; la de jugar otro turno más si al lanzar el dado se obtiene un seis y se termina en una casilla sin efecto especial. Si al repetir turno vuelve a obtenerse un seis, se procede igual, obteniendo un tercer turno si en el segundo se ha terminado sobre una casilla sin efecto. Sin embargo, de obtener un tercer seis consecutivo, se vuelve a la casilla de Inicio igual que al caer en la casilla de La Muerte ¿Era esto un aviso medieval sobre lo peligroso que resultaba recurrir al Diablo para facilitarnos las cosas? Quien sabe. La Oca siempre ha sido un juego misterioso, lleno de simbolismos. 

Editado 24-4-2023: tal como nos hizo notar Marmota en esta otra entrada, la fuente que aparece en la ilustración central es la Cascada de la Ciudadela, lo que nos indica que probablemente este tablero tuvo su origen en una editorial barcelonesa.

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Juego de la Oca. 1960 aprox. Autor y fabricante desconocido.