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miércoles, 13 de julio de 2022

LAS AVENTURAS DE TOM SAWYER

EL TEMPLO DE LOS PERGAMINOS                                                                                  ¡ALERTA DE EXPOILERZ!                                                                                              RETOS LITERARIOS 2022

                                             Presentado por… el profesor Plot.

 

Saludos, ávidos lectores.

Para el punto “una novela sobre una reunión de amigos” de nuestro Reto Literario 2022, he escogido Las Aventuras de Tom Sawyer, posiblemente la obra más conocida de Mark Twain. 

Entiendo que con lo de “reunión de amigos” se refiere a que los protagonistas deben ser un grupo de amigos que se reúnen tras una larga temporada sin verse, y todos ellos quedan implicados en la trama o el que se hayan reunido resulta significativo para esta. It habría sido perfecto para este punto, pero es un libro demasiado largo y complejo que no me apetece empezar a leer ahora con el calor que está cayendo (ya llegará su momento). Veinte años después era otra opción, pero no quería reseñarlo sin hacer antes lo propio con Los tres mosqueteros. Así pues me decidí por este, del cual debo dar una pequeña explicación adicional. 

En Las aventuras de Tom Sawyer aparecen otros chavales además de Tom. El más notable de ellos es Huckleberry Finn, su inseparable compañero, mientras que el resto intervienen más o menos pero no pasan de ser personajes secundarios. La reunión de amigos que se da en este libro es otra. 

Lo que se nos cuenta es una historia de ficción, pero Mark Twain la construyó en gran parte a base de recuerdos. Él mismo escribió que el personaje de Tom era la suma de varios de sus amigos de la infancia, de sus personalidades y formas de ser, y muchas de sus aventuras y travesuras están inspiradas en sucesos reales vividos por él y sus compañeros de escuela. En cierto modo, escribir esta novela fue una forma de reencontrarse con ellos. Esa es la reunión de amigos que se da en este libro, en la figura de Tom; la del propio Twain y su pandilla. ¿Vale para el reto? Pues no lo sé, pero es el libro que me decidí a leer y el que reseño a continuación.    

La historia tiene lugar en un pueblo de Norteamérica situado a orillas del Mississippi llamado San Petersburgo, que en realidad nunca existió, pero no debía ser diferente a tantos otros pueblecitos de la época. 

Tom es un chaval huérfano que vive con su tía Polly, a la que trae de cabeza con sus continuas travesuras. Se salta el colegio siempre que puede, se llena los bolsillos de basuras y alimañas (en ocasiones, vivas) y se excusa de trabajar con cualquier cosa que se le ocurra. Además, frecuenta la compañía de Huck Finn, otro huérfano del pueblo que vive solo durmiendo donde puede y comiendo lo que pesca, caza o le lleva Tom cuando su tía no le pilla sisando de la despensa. 

En una de sus correrías, Tom y Huck llevan a medianoche un gato muerto al cementerio, donde presencian un asesinato. Un par de vagabundos del pueblo, Joe el indio y Muff Potter desentierran un cadáver para vendérselo a un médico que los acompaña. Se produce una discusión sobre los honorarios y Joe termina apuñalando al médico. Aprovechando que Muff está terriblemente borracho (como es habitual en él), le hace creer que ha sido él quien lo ha matado. Antes de marcharse del lugar, Joe prepara la escena para incriminar a Muff sin que este se de cuenta. 

De este modo, al crear un culpable claro a ojos del pueblo, evita que las sospechas caigan sobre él, que es un reconocido pendenciero. Muff, además, es simplemente un buen tipo que nunca he tenido suerte, es muy influenciable y estaba muy borracho. Joe sabe que cuando alguien acuse a Muff, este se derrumbará y “confesará” el crimen que cree haber cometido. 

Tom y Huck se prometen uno al otro mil veces no decir nada a nadie de lo que han visto. Temen que Joe el indio les asesine a ellos también si se entera de que saben lo ocurrido. Pasado algún tiempo Muff Potter es detenido y acusado de la muerte del médico. Su chuchillo fue encontrado junto al cuerpo, y Muff admite el crimen. Se celebra un primera sesión del juicio al que también asiste Joe como parte del público, y en el que Tom permanece callado como un muerto, precisamente para evitar terminar muerto de vedad. Tras la sesión, sin que se haya dictado sentencia todavía, Muff ya es culpable a ojos de todos. 

Pero hablando entre ellos, Tom recuerda que cuando estaba sobrio Muff era simpático, y en una ocasión le arregló una cometa rota. Y Huck recuerda otra ocasión en que no tenía nada que comer y Muff compartió con él un pez que acababa de pescar. Los remordimientos de Tom terminan por superar a su miedo, y se lo cuenta todo al abogado de Muff. 

Cuando se celebra la segunda sesión y Tom es llamado al estrado, Joe lo observa con suspicacia. Y cuando Tom afirma haber visto como Joe mataba al médico, éste salta de su asiento, se abre paso entre el gentío (que realmente no hace ningún intento serio de detenerle, porque el tipo da miedo) y se lanza a la calle por una ventana. La huida de Joe exonera a Muff y convierte a Tom en un héroe durante una temporada. Joe aparentemente huye del pueblo, ya que no se le vuelve a ver, y poco a poco todo vuelve a la normalidad. 

Tom y Huck siguen a lo suyo. Sus juegos los llevan siempre a lugares alejados y aislados del pueblo. Han olvidado que fue precisamente rondando sitios así como se metieron en el asunto de Joe el indio en un principio. Pasado un tiempo, mientras juegan a buscar tesoros en una casa abandonada, vuelven a encontrarse con él. Joe llega a la casa en la que juegan los niños junto con un nuevo cómplice. Han robado un talego de monedas de plata, y al buscar un sitio en la casa donde esconderlo encuentran una caja llena de monedas de oro. Con su botín repentinamente multiplicado, Joe y su socio se marchan en busca de un lugar más seguro donde ocultarlo. Tom y Huck, que lo han observado todo sin dejarse ver (repitiendo la situación del cementerio) se prometen entonces mil veces no descansar ni un segundo hasta arrebatarles ese tesoro. Después de todo, ellos llegaron a esa casa jugando a buscar tesoros antes que aparecieran los otros, y por ello consideran que, al menos, las monedas de oro les pertenecen. 

Estoy contando todo esto seguido como si todo el libro tratara sobre la rivalidad entre Tom y Joe, pero sus choques están muy repartidos a lo largo de la historia, mezclados con otro montón de cosas. De hecho, la mayor parte del texto está dedicada a contarnos los juegos de Tom, Huck y ocasionalmente otros chicos del pueblo, el incipiente enamoramiento de Tom hacia una de las niñas de su clase llamada Becky, sus trucos para evitar tareas o castigos, y en general la vida del pueblo siempre desde el punto de vista del muchacho. 

Hacia el final de la historia, Tom y su ya novia (de palabra) Becky se pierden en unas extensas cuevas. Pasan tres días vagando por ellas, sin apenas nada de comer, hasta que Tom encuentra una pequeña salida, estando ya Becky al borde del colapso. De vuelta al pueblo, cuando relatan su odisea, Becky les dice a todos que Tom le salvó la vida porque nunca dejó de buscar la salida aun cuando ella ya se había rendido y se disponía a dejarse morir. De nuevo, el pueblo aclama a Tom como a un héroe, y el padre de Becky empieza a ver al zarrapastroso muchacho con buenos ojos. Lo que Tom se calla, es que estando en la cueva descubrió allí a Joe el indio, que había convertido una de las cavernas en otro de sus escondrijos.

Tom no cuenta esto a nadie porque está convencido que es en esa caverna en la que Joe ha escondido las monedas de oro. Su plan es dejar pasar una temporada y después ir en busca de las monedas junto con Huck, entrando por la pequeña salida que encontró, cercana a la guarida de Joe y muy alejada de la entrada principal que todo el mundo conoce. 

En una conversación casual con el padre de Becky, se entera que para evitar que nadie más se perdiera en las cuevas, la entrada fue sellada con planchas de hierro. Tom cuenta entonces que vio a Joe en la cueva, porque esto podría significar que sellaron la entrada estando él dentro. El pueblo en masa acude a abrir de nuevo la entrada, y al hacerlo encuentran justo al otro lado el cadáver de Joe consumido por el hambre y la sed, junto con un cuchillo roto con el que intentó infructuosamente abrirse paso hasta partir la hoja. 

El principal interés del libro está en realidad muy lejos de todo esto. Está en la descripción de los juegos de los chicos, en su modo de vida libre y despreocupado. En su rechazo hacia la vida elegante, refinada y encorsetada de los ricos a pesar que no cesan de fantasear sobre encontrar tesoros para volverse ricos. El que de mayores quieran ser bandoleros o piratas por la imagen idealizada que dan de estos los libros de aventuras, mientras que ellos, a su modo, siempre obran correctamente aun sin darse cuenta. Es el repaso que la lectura supone a la forma de vida, las costumbres y las supersticiones de la época. Es el leer por fin pasajes ya archiconocidos por haberlos visto en películas, series, u otras referencias, como el castigo de encalar la valla, del que Tom se libra al tiempo que convierte en un negocio cuando convence a los chicos del pueblo para que le paguen por hacerlo ellos.  

Se me ha hecho muy ameno. Un tanto desesperante porque hay tanto lapso entre una aparición de Joe el indio y la siguiente que a ratos parece que se vayan a olvidar del tema, y es lo más parecido a una trama general que tiene, pero es una buena lectura sin duda.

En el próximo punto de nuestro reto nos iremos a la India para ponernos al día de las aventuras de otro niño en Kim, de Rudyard Kipling.

The Adventures of Tom Sawyer. 1896. Mark Twain [Samuel Langhorne Clemens] (texto) Elsa Suárez (portada). Las cien joyas del milenio nº 33. Publicado por Millenium en 1999.

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