MENSAJE DEL SUPERVISOR GENERAL: todas las fotos que aparecen con la dirección de este blog sobreimpresionada son de artículos de mi propiedad y han sido realizadas por mí. Todo el texto es propio, aunque puedan haber citas textuales de otros autores y se usen ocasionalmente frases típicas y reconocibles de películas, series o personajes, en cuyo caso siempre aparecerán entrecomilladas y en cursiva. Todos los datos que se facilitan (marcas, fechas, etc) son de dominio público y su veracidad es comprobable. Aún así, al final de la columna de la derecha se ofrece el típico botón de "Denunciar un uso Inadecuado". No creo dar motivos a nadie para pulsarlo, pero ahí esta, simplemente porque tengo la conciencia tranquila a ese respecto... ¡y porque ninguna auténtica base espacial está completa sin su correspondiente botón de autodestrucción!

miércoles, 14 de febrero de 2024

SAN VALENTÍN SANGRIENTO

EL ORÁCULO DE LAS VISIONES                                                                                      ¡ALERTA DE EXPOILERZ!                                                                                                                                                                       

 Presentado por... Pecky.

¡Saludos, amigos cinéfagos! ¡Feliz san Valentín a todos los seres del universo con uno o más corazones y los sentimientos adecuados con los que llenarlos! 

Estuve repasando la videoteca de El Planeta del Espacio en busca de algo adecuado que reseñar en honor a este día y… bueno, esto es lo que tenemos. Un poco de amor, un mucho de horror, y una historia apenas explotada para el considerable potencial que tiene. Warden, el psicópata de San Valentín, solo cuenta con dos películas en el momento de publicar este artículo, y bastante espaciadas. Quizá el personaje no caló mucho, pero vale la pena recordarlo de vez en cuando, y no hay fecha mejor que esta para hacerlo.

La película es de 1981, y seguía la tendencia natural de la época de relacionar los psicópatas con fechas concretas, creando una especie de “asesinos estacionales”. Porque así como fechas como la noche de Halloween y los viernes 13 tenían ya su propia franquicia de terror, un día tan emblemático como el 14 de febrero merecía un psicópata feroz. Cumplía además con los requisitos esperables: una máscara característica (un casco de minero con luz y la careta de respiración incluida), un arma distintiva (un pico de minero), y una motivación traumática que veremos a continuación. 

La historia tiene lugar en el día de San Valentín, en un pueblecito minero llamado Valentine´s Bluff (Riscos de San Valentín). Se hace un pequeño homenaje indirecto a Viernes 13, puesto que se recalca que ese año el San Valentín, el 14, cae en un sábado. Es un San Valentín más especial de lo normal, puesto que hace veinte largos años que no se celebra. Este año el ayuntamiento ha decidido recuperar la tradición y autorizar el engalanado de las calles. 

En la víspera de la fiesta un misterioso personaje ataviado con un traje completo de minero asesina a una mujer, le arranca el corazón, y se lo envía al alcalde en una caja de bombones con forma de corazón junto con una nota: 

“Un corazón te llega de aviso, lleno de sangre, con mi deseo de felicidad. Que recuerdes lo que pasó es preciso. El día 14 se acerca ya”.

Por boca de un viejo del lugar entramos en antecedentes: en 1960, también en el Dia de San Valentín, cinco mineros quedaron atrapados en una profunda galería debido a una explosión de gas. Los capataces encargados de vigilar los niveles de metano tenían prisa por irse de fiesta y se marcharon antes de hora. Cuando se supo lo ocurrido, se tardaron seis semanas en llegar hasta los mineros. Sorprendentemente uno de ellos, Harry Warden, seguía vivo. Trastornado por el deseo de sobrevivir a toda costa, viéndose atrapado en la asfixiante oscuridad de la mina, Warden mató con su pico a sus cuatro compañeros para que estos no consumieran la limitada reserva de oxígeno disponible, y se alimentó comiéndose crudos sus cadáveres hasta ser rescatado. Pasó el siguiente año encerrado en un manicomio hasta que logró escapar y regresó al pueblo para matar a los dos capataces, vestido con un traje y máscara de minero. El 14 de febrero sus corazones arrancados fueron encontrados en una caja de bombones junto con una nota advirtiendo que el San Valentín jamás debía volver a celebrarse. Tras esto fue capturado otra vez y devuelto al manicomio, donde en teoría aún permanece encerrado… ¿O quizá no?

Mientras la gente se sigue preparando para la largamente esperada celebración, varias personas más son asesinadas y sus corazones entregados a las siguientes victimas dentro de cajas de bombones con forma de corazón, acompañadas de notas rimadas. El sheriff se pone en contacto con el manicomio donde encerraron a Warden para que le confirmen que sigue allí, pero a los empleados actuales ni les suena el nombre ni tienen informes sobre su ingreso o sus estancia. Debió haberlos en su momento pero estos se destruyeron pasado un tiempo tras su muerte, traslado o liberación. Lo único que pueden asegurarle al sheriff, es que Warden ya no se encuentra allí, y ni tan solo saben desde cuándo.

A esto se añade la trama de que Jessi (el hijo del alcalde) que se marchó del pueblo hace algún tiempo por problemas personales ha regresado. Sarah, la que entonces fue su novia está ahora con otro, y esto hace que los dos hombres se peleen por la mujer. Ésta además no les deja claro con cual de los dos prefiere estar, y pasa de tontear con ambos a no querer saber nada de ninguno de ellos. 

El alcalde y el sheriff acuerdan suspender la celebración, con la esperanza que sin el estímulo del San Valentín el psicópata deje de matar. Sin embargo esto no gusta nada a la gente del pueblo, que ya tenía la miel en los labios. Un grupo de estos deciden hacer su propia celebración a escondidas, lejos del pueblo, en las casetas y galerías de la mina. Naturalmente, el minero psicópata no dejará pasar la oportunidad de preparar con ellos unas cuantas más de sus particulares cajas de bombones. 

Algunos de los chicos logran regresar al pueblo y dar la voz de alarma mientras el resto tratan de sobrevivir, jugando al gato y el ratón con Warden en los túneles de la mina. En realidad, como nos enteramos en ese momento, Warden murió hace cinco años sin haber llegado a salir del manicomio, ya que nunca logró recuperarse de la traumática experiencia. Se nos revela entoces que el psicópata caracterizado de minero es Axel, el nuevo novio de Sarah, que era el hijo de uno de los capataces asesinados por Warden. 

Siendo todavía un niño pequeño, Axel presenció el asesinato de su padre a manos de un hombre vestido de minero, y su cordura quedó seriamente dañada. Al regresar Jessi al pueblo y ante la amenaza que esto suponía para su noviazgo con Sarah, Axel sucumbió a su mayor temor de la peor forma posible; convirtiéndose en él. 

Durante el combate final en la mina entre Axel y Jessi se produce un nuevo derrumbe en el que Axel, gravemente malherido, huye cada vez más al interior de las galerías. Riendo y gritando, se pierde físicamente en la oscuridad al mismo tiempo que su mente también se hunde en las tinieblas.

La película concluye con una lenta y melancólica balada acompañada de unos suaves acordes de guitarra, algo muy inusual en una cinta sobre psicópatas pero que queda muy bien. El tono de esta canción transmite perfectamente toda la tristeza y desesperación que implica la pérdida de la cordura, y de las terribles consecuencias que esto trae para uno mismo y para los demás. 

A pesar de haber sido censurada de sus nueve minutos más grotescos (tres de los cuales pudieron recuperarse para la edición en Blue-Ray) San Valentín Sangriento cuenta con el raro honor de ser el slasher preferido de Quentin Tarantino, un director al que no es precisamente fácil impresionar con el tema del gore y la muertes horribles.

En el 2009 se le hizo un remake que, si bien es inferior al original, no deja de ser interesante. Intentaremos conseguirlo para reseñarlo en un próximo San Valentín, si no encontramos nada más adecuado.   

My Bloody Valentine. 1981. John Beaird (guion) George Mihalka (director) Paul Kelman, Neil Affleck, Don Francks (actores principales) Lori Hallier (actriz principal) Paramount Pictures.

2 comentarios:

  1. Esta no la he visto pero el remake de 2009 me gustó, aunque era la moda del 3d y algunas escenas estaban enfocadas al mismo. De todas formas me gusta más que el asesino del 2009 se volvió psicopata por la culpabilidad que por presenciar un asesinato.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La del 2009 la tengo vista pero no recuerdo gran cosa de ella. Sí que me gustó menos que esta primera, y que cambiaban algunas cosas, pero no guardo un recuerdo claro de ella. Ahora mismo no se a que te refieres con lo de la culpabilidad. Tengo que conseguir una copia y volver a verla.

      Eliminar