La
Muralla es una de las marcas
comerciales de Dulces Olmedo García.
En 2015 (o puede que antes, no se la fecha
exacta) sacó al mercado una colección de cajitas de lata que contenían dulces
de chocolate. Tampoco se cuantos modelos hay, pero todos los que tengo parecen
estar orientados a conmemorar fiestas concretas. Contenían pequeñas chocolatinas. Un cordelito o cinta en su parte superior permite colgarlos de algo como si se tratasen de adornos.
Estos tres primeros están claramente destinados a
Halloween. De izquierda a derecha vemos:
-Un monstruo de Frankenstein un tanto mal cosido,
pues los puntos de la frente y el brazo derecho parecen medio sueltos. Quizá
por eso ya se está aprovisionando de un ojo de repuesto, para cuando le haga
falta. Me llama mucho la atención el clásico tatuaje de marinero en su otro
brazo. La cajita sigue el contorno del personaje y tiene un cierto relieve.
-Una brujita típica con su traje de colores
calabaceros, la clásica combinación de negro y naranja asociada a Halloween. Sombrero
con hebilla a la usanza de los peregrinos (¡la última moda en Salem!), pendientes con forma de calavera, y un
gato… o mejor dicho, un frankengato (los tornillos y costuras lo delatan). La cajita tiene forma de ataúd.
-Un espíritu elegantemente vestido, con sayo negro y
túnica naranja (se repiten los colores clásicos), un dorado amuleto y un bastón
con empuñadura de calabaza, para ayudarse a andar sin tropezar entre ese montón de
cráneos. La cajita, también con forma de ataúd.
Este segundo grupo está también orientado a
Halloween, y son dos modelos diferentes de calabazas sonrientes. A primera
vista son iguales, aunque cambia la forma de los ojos y la nariz. Las cajitas
tienen forma esférica (mejor dicho, forma de calabaza) pero aquí solo puse la
mitad de cada una, para que la foto quedara más clara. El rostro aparece por
ambos lados de la calabaza.
En el tercer grupo tenemos cajitas que hacen referencia a otras dos fiestas.
-A la izquierda, un pingüino abrigado con ropa
blanca y roja, y sosteniendo un regalo bien envuelto nos sugiere una estampa
navideña. Ya sabemos que Papá Noel vive en el Polo Norte y los pingüinos en el
Polo Sur, pero eso es lo de menos. También los pingüinos buenos reciben regalos.
La cajita tiene la misma forma del pingüino y zonas en relieve.
-A la derecha, un conejo comiéndose una zanahoria es
quizá la cajita menos llamativa de todas, aunque igualmente bonita. De entrada, sin haber visto las
otras, no la relacionaríamos con ninguna fiesta en particular, si no que la podríamos
tomar como simplemente una cajita con la forma de un animal cualquiera. Pero teniendo
en cuenta que todas las demás cajitas hacen referencia a fiestas concretas,
debemos suponer que el conejo corresponde a la Pascua. La cajita sigue el
contorno del conejo y también tiene zonas en relieve.
Nota: un par de meses después de publicar esta entrada encontré por casa otra de las cajitas de la colección, mientras buscaba (como no) otra cosa completamente diferente que al final no apareció. Modifico la entrada para añadirla aquí al final. Se trata de una brujita halloweenera de apariencia más moderna que la otra que vimos, que tenía un aspecto clásico.
Cajitas de chocolatinas de La Muralla. Varios modelos. Dulces Olmedo García S.L. Fabricado en exclusiva para Mercadona/Hacendado.
Nota: un par de meses después de publicar esta entrada encontré por casa otra de las cajitas de la colección, mientras buscaba (como no) otra cosa completamente diferente que al final no apareció. Modifico la entrada para añadirla aquí al final. Se trata de una brujita halloweenera de apariencia más moderna que la otra que vimos, que tenía un aspecto clásico.
Cajitas de chocolatinas de La Muralla. Varios modelos. Dulces Olmedo García S.L. Fabricado en exclusiva para Mercadona/Hacendado.
Estan bien las cajitas aunque la de Frankenstein tiene pinta que tiene ganas de orinar y ahi esta el pobre aguantando el tipo. Un un buen detalle la cinta para colgarlas.
ResponderEliminar¡Jaja! Siempre es difícil saber que le pasa a Frankenstein por la cabeza... a parte de los tornillos, claro.
EliminarEn algún rastro he visto cajas de este tipo pero no las he comprado pprque estaban ralladas y abolladas.
ResponderEliminarSiempre es interesante y agradable que, aunque alejados de ese estilo ochentero más oscuro y artesanal, se sigan vendiendo este tipo de productos relacionados con los monstruos y el terror.
Si, es curioso que cuanto más conocimientos tenemos (como especie) y cuanto más segura es en general la vida, más nos aferremos a las historias de monstruos que antiguamente se daban por ciertas y a cualquier tipo de iconografía que nos las recuerden. Es como si nos faltara algo indispensable sin ellas.
EliminarTal y como mencionas, estas cajas se vendían en Mercadona repletas (es un decir) de chocolatinas pequeñas. Si no me deshice de ellas (cosa que dudo porque tengo Diógenes), tengo unas pocas de la colección.
ResponderEliminarTengo el ataúd de la bruja. También tengo el conejito que, efectivamente, salió en Pascua, junto a un huevo azul con un pollito dibujado. Y creo que el pingu también lo tengo por casa.
Si las encuentro te aviso :)
El huevo azul con el pollito no recuerdo haberlo visto, pero si que tuve en su momento otra versión del ataúd de la bruja en la que esta tenía un aspecto más a muñeca Bratz que a bruja clásica.
Eliminar