Una
vieja mansión abandonada al final de la calle. Catorce preadolescentes dispuestas
a pasar su primera noche de pijamas fuera de casa. Un montón de monstruos con
ganas de asustar a alguien. Esta va a ser una noche divertida…
Bump
in the night (algo así como como Sobresalto en la noche
o Escalofrío en la noche) es un juego de ambientación
fantasmagórica. El
tablero representa una vieja mansión que es el hogar de un grupo de monstruos. La
mansión es tomada al asalto por catorce ruidosas jovencitas que se han desafiado
unas a otras a pasar una noche entera en la casa abandonada del barrio. Cada jugador
(entre dos y seis) controla una misma cantidad y tipo de monstruos. El objetivo del juego es ser
el primero en acumular cinco víctimas, considerándose como tales cada niña que consigan hacer
huir gritando por alguna de las puertas de la casa, o que quede catatónica
acurrucada en un rincón.
El
tablero está dividido en seis partes, ilustradas a doble cara, que se pueden
recombinar de varias formas de modo que el mapeado de la casa cambie de una partida a otra. Tras
dar forma a la mansión, colocamos a las chicas en seis grupos de entre cuatro y
una, mediante un sistema que reparte estos grupos de forma aleatoria por las
diferentes habitaciones.
.
Cada
jugador cuenta con seis monstruos: un gato negro, una bandada de murciélagos, un
goblin, un poltergeist, un fantasma y un espectro de la muerte. Los
goblins son los más traviesos, y los primeros en actuar. Una vez situados los
grupos de chicas en las habitaciones, los jugadores colocan a su goblin en uno
de los pasillos de la casa.
La
secuencia del juego es como sigue: en
su turno, cada jugador coloca un nuevo monstruo en una sala, o lo cambia a cualquier
otra si ya está sobre el tablero, sin importar si ya hay chicas o monstruos en
esa sala, o si los monstruos presentes en la sala son del mismo u otro jugador.
Los monstruos conviven tranquilamente unos con otros y son además invisibles a no ser que se manifiesten. Esto significa que puede
haber chicas y monstruos en una misma sala sin que ocurra nada, a no ser que el
jugador cuyo turno esté en curso decida que los monstruos se vuelvan visibles
hasta el fin de ese turno.
También se puede bloquear o desbloquear una puerta. Hay unos pequeños marcadores con el símbolo
de un candado, y el jugador puede colocar uno sobre una puerta para bloquearla o
quitar uno (sin importar si lo puso él o no) para desbloquearla. Las puertas
bloqueadas no pueden ser cruzadas por las niñas durante su secuencia de huida.
-"¡Os digo que se ha cerrado sola!"
-"No seas tonta, Sandy. Habrá sido el viento..."
.
Tras
colocar/mover un nuevo monstruo y bloquear/desbloquear una puerta, el jugador
puede elegir que los monstruos se manifiesten volviéndose todos
visibles hasta el fin del turno, tanto sus propios monstruos como los de los
otros jugadores.
Al
manifestarse los monstruos, todas las niñas de una sala acumulan puntos de Miedo. El Miedo generado depende de los monstruos presentes en la sala (algunos
asustan más que otros), del tamaño del grupo de niñas (si están solas tendrán
más Miedo y si son un grupo grande menos) y de la sala en la que se encuentren
en ese momento (algunas salas, como el sótano, dan más Miedo que otras). Se calcula
cuanto es el Miedo inicial, y eso indica la cantidad de desplazamientos adicionales que podrán hacer las niñas. ¡Cuánto mayor sea el susto que se lleven más velozmente huirán!
El
mismo jugador que inicia la estampida es quien desplaza a las niñas en su
huida, pero lo hace siguiendo una serie de normas. No pueden cruzar puertas
bloqueadas, y entre las que puedan cruzar, no se desplazarán a salas o pasillos
que contengan monstruos si pueden evitarlo, etc. Las niñas nunca se detendrán
en una sala o pasillo con monstruos, por lo que seguirán moviéndose hasta salir
de la mansión o encontrar un lugar seguro (sin monstruos). Los puntos de Miedo
acumulados son movimientos extra. Cuando las niñas se detienen en un lugar
seguro, puedes usar los puntos de Miedo acumulados para que sigan moviéndose.
-"Tina... ¿no te parece que de pronto hace mucho más frio que antes?"
,
El
objetivo es echarlas de la casa o dejarlas aterrorizadas hasta la mañana
siguiente, por lo que al ir moviéndose por la casa van acumulando puntos de
Terror. El Terror depende del primer monstruo que hayan visto ese turno (de
nuevo, hay monstruos más terroríficos que otros) y de la variedad de monstruos
que encuentren (acumulan Terror por cada nuevo tipo de monstruo o cada nuevo
color de monstruo con el que se topen en su huida). Las niñas que acumulen
cinco puntos de Terror se quedan acurrucadas en un rincón hasta el día
siguiente y se retiran de la partida. Es difícil que todas las niñas de un
grupo acumulen cinco puntos de Terror. Normalmente acumularán dos o con suerte
tres antes de llegar a una sala segura, donde se detendrán. Es aquí cuando se
usan los puntos de Miedo inicialmente acumulados para hacer que alguna de ellas
siga moviéndose, encontrando otros monstruos, e iniciando otra secuencia de
huida en la que acumulará más Terror o llegará hasta una de las tres salidas de
la casa (puerta principal, verja del cementerio, o puerta del garaje).
Es
realmente un juego de estrategia, ya que hay que posicionar con cuidado a los
propios monstruos, contar con donde estén posicionados los de los otros jugadores,
y asegurarse de crear una ruta de huida adecuada a base de bloquear y
desbloquear puertas de forma que se fuerce a pasar a las niñas por los lugares
donde acumulen más Terror, o dirigirlas hacia una salida. También hay que tener en cuenta donde va a detenerse el grupo, para evitar dejárselo bien posicionado a otro jugador.
Los
monstruos tienen también características especiales. El poltergeist, por
ejemplo, puede abrir o cerrar una puerta adicional en la sala en la que se encuentre,
además de la que abre o cierra libremente el jugador. El goblin puede seguir
escondido cuando los otros monstruos se manifiestan, de forma que un jugador
puede elegir que su propio goblin no contribuya a aterrorizar una estampida de
niñas provocada por otro jugador, etc.
También
hay cartas con efectos diversos: desvanecer monstruos de otro jugador (los
puede volver a poner en juego en turnos posteriores), movimientos adicionales
de niñas, interrumpir turnos, otorgar puntos de Terror adicionales,
etc.
Un
juego algo complejo al principio por las muchas cosas que deben tenerse en
cuenta, pero muy divertido cuando le pillas el tranquillo. Quizá lo mejor del juego,
más que las figuritas, la mecánica, o los dibujos del tablero, es la intención
con la que se ha hecho. Porque muchas veces vemos películas de terror para ver
como los humanos se enfrentan y vencen a los monstruos. Pero muchas otras veces
vemos estas mismas películas simplemente para ver como los humanos caen en manos de
los monstruos.
Puedes ver otro juego de casa encantada pulsando aquí.
Bump
in the night. 2008. Colin Dimock. 2-6 jugadores a partir de 12 años. Twilight
Creations Inc.
No hay comentarios:
Publicar un comentario