Presentado por... Migu.
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Comenzaremos nuestro tour visitando la Masa Siniestra, el playset o decorado de juego más pequeño producido por Mattel para su línea de
Masters del Universo. Eso si no contamos como playset el segmento de almena que acompañaba a la Garra Voladora, que es más una base para ese vehículo o un añadido al Castillo de Greyskull.
A pesar de estar prevista desde el inicio del blog la fundación de la colonia, hace ya más de un año, la sección de Instalaciones disponibles no tenia todavía ninguna entrada.
Los playsets, por su tamaño y el engorro que supone tener que sacarlos con cuidado de lo alto de los muebles donde los tenemos expuestos (y volver a colocarlos luego) son lo que más pereza nos daba ponernos a fotografiar para poder comentarlos. Pero en algún momento hay que empezar con ello, así que hoy inauguramos esta sección, para que aquellos viajeros que deambulan por el Planeta del Espacio comiencen a encontrarse con edificios y estructuras que amenicen el paisaje.
La Masa
Siniestra era una maquina de tortura/control mental de la Horda del Terror. El desafortunado prisionero era colocado en su interior, quedando atrapado por la
garra de hueso que lo mantenía inmovilizado. Mientras, el cráneo (que estaba hueco y previamente habríamos rellenado con Blandi-blub o slime genérico) se inclinaba lenta
y ominosamente cubriendo a la víctima atrapada con el pegajoso limo verde que le brotaba de la boca y las fosas nasales.
Atendiendo al trasfondo del juguete, el prisionero quedaba
convertido por el efecto de este mejunje tóxico en un asqueroso mutante de
comportamiento zombiatico, a las ordenes de Hordak.
Personalmente a
mi nunca me dio la impresión que su función real fuera esta. A mi me parecía una puerta. En el minicomic Las Hordas de Hordak, éste demuestra
tener una asombrosa facilidad para abrir portales a otros mundos o incluso a
dimensiones propias con un simple gesto de su mano. Y lo cierto es que la
estructura de la Masa Siniestra me hacia pensar en eso, en una especie de Stargate versión Horda
del Terror que los ejércitos de Hordak iban erigiendo en todos los mundos que
conquistaban para poder transitar rápidamente de unos a otros.
El aspecto de
pórtico (las columnas y el chapitel rojizo) además tapiado y con un rostro de
Hordak esculpido (como si se tratara de algún tipo de guardián) me
hacían imaginármelo como portales entre mundos comunicados unos con otros, más que como una máquina de lavado de cerebro. Y
naturalmente, si para activar el pórtico era necesario situarse frente a él y
presionar o decir una contraseña al rostro de piedra (o algo así), la garra y
el cráneo eran un sistema de seguridad previsto para aquellos que trataran de
hacer uso del portal sin autorización (así justificaba también la trampa del slime).
Aun sabiendo desde el principio cual era la función de la Masa Siniestra, todavía a día de hoy me cuesta verla de forma diferente a como me la imaginaba de niño. Pero dudo que nadie en su infancia se ciñera en un 100% al
trasfondo, alineamiento, o personalidad oficial de todos los juguetes con los que se entretenía, y yo no voy a ser una excepción. La Masa Siniestra que
adorna uno de nuestros estantes siempre será un portal a otros mundos. Uno
particularmente arriesgado de usar, si tus lealtades no están con La Horda…
Slime Pit. Masters del Universo. Mattel. Presentado en caja. 1985.
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