LA COLECCIÓN DE FIERAS
El Crack fue una de las mascotas del programa-concurso Un, dos, tres… durante su etapa de 1987 a 1988. Para quienes no conozcan el programa, a los participantes se les ofrecían continuamente objetos acompañados de cripticas notas, que daban pistas sobre los regalos que podían estar relacionados con cada objeto. A lo largo del programa tenían que ir descartándolos, hasta quedarse solo con uno, momento en el que se les revelaba el premio que correspondía al objeto que habían conservado.
Dos de estos premios eran una figura del
Boom y otra del Crack, las dos mascotas que tenía el programa en ese momento. El
Boom era una pequeña criatura rosada que representaba a alguien con suerte,
millonario y alegre. La otra mascota, el Crack, era un cabizbajo vagabundo con
la ropa destrozada, a quien todo le salía mal. Si los jugadores obtenían el
Boom, elegían que premio se quedaban de entre todos los que habían descartado a
lo largo del programa (y entre los cuales solía haber casas, yates, o los
mejores modelos de coches del momento). Si al objeto que conservaban hasta el
final le correspondía el Crack, los jugadores se iban con las manos vacías.
Estas figuras eran originalmente llaveros, de goma blanda, y carentes de marcas de fabricante o logos. Aunque el Crack siempre me cayó muy simpático como personaje (mucho mejor que ese incordio chirriante y saltarín que era el Boom) y en su momento jugué mucho con estos llaveros como si fueran figuritas de goma normales, lo
cierto es que han permanecido la mayor parte de los últimos treinta y tres años
dormitando en el fondo de un cajón.
La reciente subida de impuestos en general
y del coste de la energía en particular, amarga guinda de la peor gestión económica
y social que ha habido en España desde hace mucho tiempo, hizo que me acordara
de pronto de este simpático personaje. Y me gustaría proponerlo como mascota de
la actual crisis. Ya que los Mundiales de futbol y los Juegos Olímpicos tienen
mascotas, no veo porqué algo mucho más importante, como la crisis económica que
tenemos encima, no deba tenerla también. Creo que tal como están las cosas en
estos momentos, el Crack es un personaje con el que la mayoría nos podemos sentir identificados.
Puedes ver otro artículo relacionado con el Un, dos, tres… aquí.
Boom y Crack no me sonaban nada. Al decir de Boom que era una criatura rosada he pensado directamente en El Chollo, el cual siempre me ha recordado a un jamón dulce...
ResponderEliminarTambién recuerdo a La Botilde (tenía su juego de mesa pero creo que mis padres lo dieron o tiraron 😭), al Antichollo (que para mí era el jamón podrido) y, como no, a Ruperta.
Pobre Crack... No sé si se merece "representar" a una panda de impresentables...
Anda que la gente también tiene lo suyo... Nos suben la luz y lo único que hacen son memes y adaptarse a hacer la lavadora a las 2am... Para otras cosas salen a quemar contenedores (lo que tampoco apoyo porque los contenedores tampoco tienen la culpa y ya tienen lo suyo tragándose nuestra basura, pero al menos sería una reacción más acorde...)
Por cierto, no sabía que en vuestro Planeta también ha subido la luz, estaba pensando en mudarme...
El Boom y el Crack son de las últimas mascotas que tuvo el programa, y las que menos duraron. Y naturalmente el Crack no representaría a esa pandilla que nos ha llevado a esta situación, sino a como de pobres nos estamos quedando todos por su culpa.
EliminarPor otro lado, en el Planeta del Espacio funcionamos con generadores de frikismo ^_^ así que no tenemos problemas energéticos. Pero como yo tengo que viajar frecuentemente a la Tierra, la subida eléctrica me afecta -_-
A mí el Boom se me había borrado de la memoria de un modo rarísimo. Recordaba al Crack - precisamente por esta figura - y me acordaba de la canción entera, con las voces de ambos, pero he tenido que mirar en Internet para visualizar al Boom. Por mucho que lo pensara, no lograba recordar qué aspecto tenía.
ResponderEliminarEstas mascotas a mí siempre me recordaron a dos parejas de personajes de cómic creadas por Escobar: Don Óptimo y Don Pésimo, y Carpanta y Protasio. Los primeros, si os acordáis, eran dos señores de clase media que hacían honor a sus nombres, y mientras el primero siempre era alegre, jovial y dicharachero, el otro era un cenizo catastrofista, y lo veía todo negro. Carpanta era pobre y siempre estaba triste y hambriento, mientras que el orondo Protasio, que solía apañárselas para realizar trabajillos y poder comer pollo asado y chuletones (y hasta fumar puros), rara vez compartía su suerte con su desesperado amigo. Supongo que, como mascotas, el Boom y el Crack representaban que el concurso se ganaba con más suerte que habilidad, pero es llamativo que en estos dúos de personajes opuestos, la buena y mala fortuna se repartiera siempre de modo tan polarizado, y el más suertudo de cada pareja nunca hiciera gran cosa para aliviar las desdichas de su compañero. ¿Simple recurso humorístico, o reflejo fiel de la idiosincrasia española?
A don Optimo y don Pésimo no los recuerdo, ni me suenan los nombres siquiera. A Carpanta sí, siempre pobre y hambriento. De niño no era capaz de pronunciar el nombre de Protasio y lo llamaba "Potasio" ^_^U
EliminarProtasio me caía muy mal porque en ocasiones invitaba a comer a Carpanta solo para burlarse de él y al final no le daba nada, o le entregaba algo distinto a lo prometido. Supongo que la inspiración de ese tipo de personajes de Escobar era básicamente un reflejo de la dictadura en la que le tocó vivir, en la que una mitad muy concreta de la población nadaba en la abundancia y la otra mitad se hundía en la pobreza, con poco término medio.
Sí, recuerdo la historieta en que Protasio invitaba a Carpanta a compartir su plato, y después de zamparse una opípara comida y no darle nada a Carpanta, recalcaba que lo había invitarlo a compartir el plato como recipiente, y que llenarlo ya era cosa de Carpanta. Este se iba llorando de hambre y de frustración, hasta el punto de que el perro Toby - también un personaje de Escobar - le acababa regalando un hueso por el que se habían peleado al principio de la historieta, pensando que a Carpanta le hacía más falta que a él.
EliminarHace tiempo leí en algún sitio que las historietas de Carpanta fueron censuradas por la palabra "hambre", ya que en la España franquista nadie pasaba hambre. De modo que Carpanta seguía llamándose así, seguía viviendo bajo un puente, seguía llevando ropas deshilachadas y llenas de remiendos, y seguía llorando por no comer mientras soñaba con pollos asados y enormes pescados, pero la palabra "hambre" se sustituyó por "apetito". Problema resuelto.
Como siempre, la censura al rescate de la dictadura.
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