Presentado por...Zag.
¡Extra! ¡Extra! ¡Los expertos clasifican el Quinto Reto Escritubre como "algo pocho"! ¡Lea todas las opiniones y enfádese mucho si no le gustan! ¡Extra!
RETO 5: El reto de
hoy es inventar un género, entre más largo el nombre, mejor, dígase: que sea un
género tan específico, que solo una novela o dos puedan caber en él. Por
ejemplo, para describir la última novela que escribí, dije que era una "novela
feminista ultra-violenta de muertos vivientes". Reto adjunto: reflexionar
el porqué de este reto...
Bueno, este reto en particular no consiste en escribir un relato, sino en poner una serie de términos uno a continuación de otro. No nos parece muy interesante pero lo vamos a hacer igualmente por tratar de completar todos los del mes.
Como hay que inventarse una calificación para encuadrar una historia de la forma más concreta posible, crearemos un género específico para el relato que presentamos al reto de ayer, titulado El Pecio. Lo podríamos calificar como "Relato breve de terror submarino y baja ciencia ficción realista, contado en primera persona, sin elemento romántico ni de fantasía o esotérico, reducido plantel de personajes y final abierto".
Se indica también
que hay que reflexionar sobre el porqué de este reto. Probablemente la
propuesta se deba a la obsesión que hay ahora por ponerle etiquetas a todo. Resulta
que de pronto ya no tenemos dos géneros sexuales sino doscientos (y podemos autoasignarnos
tantos de ellos como queramos), no cinco sentidos sino veinte, montones de
pronombres personales que podemos elegir al gusto, etc. Y
además, la gente ya no tiene paciencia para nada.
Hay que llenarlo
todo de etiquetas para que cualquiera sepa de antemano si la película que va a
ver, el libro que va a leer, la persona que va a conocer, o el discurso que va
a oír, se ajusta exactamente a lo que está buscando. Todo tiene que (y todos
tenemos que) estar hiper etiquetados para poder ser juzgados de un simple
vistazo. Por eso El Pecio no es un relato breve de terror, si no un “Relato
breve de terror submarino y baja ciencia ficción realista, contado en primera
persona, sin elemento romántico ni de fantasía o esotérico, reducido plantel de
personajes y final abierto”. Porque diciendo todo eso, la gente sin paciencia y
sin sentido de la aventura ya tiene elementos con los que decidir si le va a
gustar o no antes de leerlo.
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