LA COLECCIÓN DE FIERAS
¡Hola raros!
Los Tarranga fueron una colección de figuras robóticas producidas por Simba. No es mucho lo que sé sobre ellas. Solo tengo constancia de una primera y quizá única serie de ocho figuras aparecidas hace, como mínimo, diez años.
No debieron tener mucha repercusión. En su momento contaron con un sitio web oficial, pero actualmente ya no es posible acceder a él, y en general son una colección bastante desconocida.
Los Tarranga se vendían en blindbags. Cada figura estaba acompañada de un escudo y un arma. Tenían la ventaja de ser desmontables. Cabeza, brazos y piernas podían separarse fácilmente de su cuerpo y colocarse en otro, lo que atenúa en parte la principal desventaja de los blindbags: los que te fueran saliendo repetidos podías desensamblarlos para ir dando forma a robots nuevos y únicos.
Estaban divididos en dos bandos enfrentados de cuatro robots cada uno: los Atnumas, entre los que primaban los colores blancos, grises y azules, y los Ruwars, de colores anaranjados, marrones y caqui. Si tenían algún trasfondo, nunca llegué a conocerlo. En el único anuncio que llegué a ver de ellos (una animación por ordenador bastante tosca) nos mostraba a dos de los robots intercambiando golpes en un paraje volcánico. Un tercero caía entonces del cielo, envuelto en llamas como un meteorito, y explotaba al tocar suelo. Las piezas del robot destruido se reunían de nuevo y éste se ponía en pie. Con esto se nos daba a entender que el montarlos y desmontarlos era parte del juego, porque los robots se reconstruían por si solos.
Las figuras miden unos 10 cm de altura y tienen once puntos de articulación: cabeza, brazos, codos, muñecas (son ambidiestros) piernas y rodillas. Al representar robots, las piezas que se pasan de uno a otro quedan mejor integradas que si se tratase de guerreros, animales o monstruos. Los seres orgánicos tienden a ser simétricos, pero la forma de un robot no obedece más que a su funcionalidad o disponibilidad de repuestos.
Todos los que tengo son adquiridos de segunda mano. Y como suele ocurrir con estas colecciones de figuras desmontables, a medida que las piezas que se han dejado sueltas se pierden la gente va empleando las que le van quedando para completar otras figuras.
Esto termina dando lugar a figuras cada vez más mezcladas y caóticas en las que los brazos y piernas no son parejos, alguna extremidad va del revés, o los colores no encajan demasiado bien. Pero lo importante, después de todo, es seguir adelante aunque sea a base de parches.
Nombres desconocidos. Tarranga. Simba. Presentados en blindbag. Once puntos de articulación. 2013 o anterior.
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