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domingo, 2 de septiembre de 2018

LA ISLA DEL REY SAURIO

EL TEMPLO DE LOS PERGAMINOS 
¡ALERTA DE EXPOILERZ! 
Las islas tropicales, como escenario de historias de aventuras, tienen algo especial. Su idea evoca playas de arena dorada, el oleaje del mar batiendo la costa, brisa cálida, vegetación exuberante, fauna salvaje, templos perdidos... pero también tribus de caníbales y reductores de cabezas, sacrificios humanos y magia negra, enfermedades, fiebres y parásitos. Son simultáneamente lo más parecido a la idea del paraíso y a la del infierno.

En este marco tiene lugar la aventura de La Isla del Rey Saurio, donde debemos buscar el modo de acabar con dicha criatura. El Rey Saurio, mediante la magia y la química, ha provocado mutaciones en la flora y la fauna de la isla, y entre sus propias tropas. Su ejército de hombres-saurio y orcos han estado raptando pescadores de los pueblos costeros para hacerlos trabajar como esclavos en su mina de oro. Un antiguo compañero de armas, retirado en uno de esos pueblos, nos pide ayuda para acabar con él y rescatar a los esclavos. Pero el desafío resulta ser demasiado para este viejo guerrero, y pronto nos veremos solos frente al peligro. 

No se trata de una aventura especialmente difícil, en realidad. Varios de los combates más duros son evitables, y hay una buena cantidad de objetos poderosos que nos facilitarán bastante las cosas, si conseguimos dar con ellos. Hay menos muertes automáticas de lo normal, pero el entorno es en cambio más dañino que de costumbre: espinas venenosas, esporas asfixiantes, malaria... el mero avance a través de la jungla nos debilitará, y nuestras provisiones serán rápidamente pasto de moho e insectos. Afortunadamente morir de hambre en la isla es difícil, ya que también encontraremos comida con cierta frecuencia en forma de frutas o caza. En estos sentidos, el libro está mucho mejor compensado que otros.

Tras acabar con montones de hombres-saurio, rescatar a montones de presos y comer montones de plátanos (y con un poco de suerte, hacernos amigos de un mono, que nunca está de más) llegaremos al fin a la fortaleza del Rey Saurio. 
Nos tendremos que enfrentar primero a su felino amaestrado, antes que el Rey Saurio en persona se moleste a enfrentarse con nosotros. Pero el Rey Saurio no es en realidad nuestro verdadero enemigo, sino el Gonchong, la criatura parasitaria que lo controla como a un títere. Un insecto astuto y maligno que está aferrado a su cabeza como una corona... un mamífero, al servicio de un reptil, al servicio de un insecto. Un ejemplo de cómo funcionan las cosas en La Isla del Rey Saurio.

Puedes ver otro librojuego de esta colección pulsando aquí.

Island of the Lizard King. 1984. Ian Livinsgtone (texto) Alang Langford (ilustraciones). Lucha Ficción nº 7. Ediciones Altea (edición española).

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