Se entregaba junto con los menús
infantiles de McDonald en 2018. Es un artículo promocional de la película Hotel
Transilvania 3.
Contiene ocho pequeñas diapositivas para ver al trasluz, que nos
muestran a los protagonistas en diversas escenas de sus vacaciones. El botón de
disparo de la cámara permite pasar de una a otra. Este tipo de juguetes fueron
muy populares en los 80, y normalmente se hacían con forma de televisor.
Todavía no he podido ver la tercera
parte de esta saga, pero he de confesar que la primera me gustó bastante (la
segunda me aburrió un poco) y el aspecto retro y monstruoso de la cámara me
atrajo inmediatamente.
Opino como tú, la primera es muy divertida, la segunda tiene toques de humor, pero psé y la tercera no la he visto.
ResponderEliminarPuede que sea porque la primera, aun siendo divertida y para niños, tenía una carga emocional mayor; el padre que sobreprotege a su hija hasta el punto de preferir que viva encerrada a que se enfrente al mundo, la tristeza de éste por su esposa pérdida, la historia de amor que se ve venir desde el principio entre Mavis y Johny, el peligro de que cierren el hotel por la presencia de un humano entre ellos... La segunda se centraba más en hacer gracia durante todo el film, y solo al final metían un poco de drama con eso del padre de Drácula que seguía teniendo prejuicios hacia los humanos. Y hasta las partes graciosas de la segunda, siendo muchas más, eran más convencionales que las de la primera, que llegaban a ser bastante disparatadas.
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