Una figura que encontré en una tienda
tipo bazar que saldaba sus existencias por cierre. Parece representar un jinete
chino o mongol con su camello. Es una pieza bastante extraña, porque por una
parte la figura en sí es de buena calidad, está muy articulada y tiene ropa de
tela. Pero por otra parte el resto de complementos no casan bien, no dejan claro a que
cultura pertenece, y el camello ni tansolo está a la escala adecuada, resultando demasiado pequeño para el jinete.
La
impresión que da es que se trata de un producto confeccionado a partir de
restos de otros, algo bastante habitual en los juguetes chinos… si es que
proviene de allí, ya que no hay ninguna clase de marca, logo o información del
fabricante, ni tan solo del país de origen.
Una etiqueta nos informa que fue
importado y distribuido por Vidal Europa S.A. (una empresa valenciana) pero
nada más. Lo adquirí en 2014, creo, pero ya entonces me dio la impresión de llevar
bastante tiempo en la tienda por la cantidad de polvorientas telarañas que encontré
adheridas a la parte de atrás y los laterales de la caja al tomarla del
estante. Le debieron pasar un trapo por el frontal para lavarle la cara, pero
no se molestaron en limpiar el resto. Quizá no tenían muchas esperanzas de venderlo.
La decoración de la caja es de hecho lo
que más me llamó la atención en un principio; una ilustración totalmente loca
que muestra a jinetes romanos cargando con sus pilums (empuñándolos como si fueran lanzas de
torneo de caballeros medievales) contra lo que parecen ser guerreros otomanos
montados en elefantes (bastante pequeños) y camellos (del mismo tamaño que los
elefantes). Una ilustración tan pretendidamente realista (por usar elementos históricos) pero a la vez tan
obviamente errónea era algo que no podía dejar pasar.
La figura del guerrero tiene unos 30cm
de altura, y está vestida con ropas de tela brillante; pantalones, túnica y un
pañuelo para la cara. Un sombrero de paja con barboquejo y sandalias completan su atuendo. Por debajo del sombrero, el cráneo está cubierto
por un pañuelo rojo que forma parte del esculpido de la cabeza, siendo esta la única
prenda integrada en la figura.
La ropa parece representar un deel
mongol de seda. Fijaos en el detalle de la decoración floral en el dobladillo
de las perneras, y que las sandalias abiertas están ajustadas con cordel. Sin embargo,
el sombrero de paja no es un típico culí oriental, pareciéndose más a
los sombreros de labrador occidentales.
La musculatura del cuerpo está muy
detallada, y dispone de quince puntos de articulación: cabeza (cuello), cuatro
por brazo (hombro, biceps, codo, y muñeca, además de ser ambidiestro) y tres por pierna (cadera, rodilla y
empeine).
Como equipo personal, el guerrero dispone, además del sombrero, ropa y calzado, de un escudo que tampoco es el clásico escudo ligero de
mimbre mongol o chino, sino que se parece más a una rodela normanda. Tiene un
katana japonesa en lugar de un sable corto curvo, y el arco compuesto parece
tener una mira, por lo que sin duda es un complemento reaprovechado de otra línea.
Tampoco hay que ser demasiado estricto con el rigor histórico de un juguete… y
siempre cabe la posibilidad que su variado equipo haya sido tomado como trofeo
de diversos enemigos derrotados provenientes de otras culturas.
Por su parte, el camello está formado por
varias piezas pegadas y carece por completo de articulaciones, pero como figura
es bastante correcta y se nota que fue pintado a mano, por cierto descuido (brochazos
cruzados) en algunos puntos. El camello cuenta con su propio equipo: una
talabarda de tela decorada en la que hay una funda (para el arco y las flechas
del jinete) en el lado izquierdo.
En el derecho, un soporte permite
llevar enrollado un manto de borreguillo. Me gusta mucho que las figuras de
acción lleven complementos no relacionados con el combate. Obviamente un
guerrero debe llevar armas, pero algo tan básico como esto (una manta para no
helarse por la noche o para no poner su comida directamente en el suelo cuando
se detenga a descansar) no suele verse.
Además de la talabarda y la manta
(pequeña, pero mejor eso que nada) hay un saco (imagino que con comida) y un
odre de agua. Están hechos de tela y atados uno al otro, lo que permite
llevarlos sobre el camello como si se trataran de alforjas, o que el propio guerrero los transporte como un morral.
El camello ya hemos visto que resulta
muy pequeño en comparación con la figura, y la imagen del jinete sobre éste es
la misma que daría Conan el bárbaro cabalgando en un pony. Sin embargo, los mongoles (si
de eso se trata) luchaban a caballo y empleaban los camellos (más lentos, pero
también más resistentes) como animales de carga para transportar sus pertrechos,
por lo que podría tratarse de un camello todavía muy joven (por su tamaño, solo
un poco mayor que una cría) empleado con ese fin.
No suelo comprar figuras con ropa de
tela. Siempre he preferido las que ya llevan la ropa integrada como parte del
esculpido de la figura, pero también siempre hay excepciones. Ignoro si esto se
vendió como figura única o forma parte de una colección (no he visto más figura
que esta, ni del mismo modelo ni de uno diferente) y al carecer de todo dato
rastreable (salvo el importador) resulta difícil averiguar nada más.
Nombre desconocido. Ancient Warrior. Marca desconocida. Presentado en caja con ventana. Quince puntos de articulación. 2014 o anterior.
La verdad es que una vez analizándola detenidamente tiene su punto.
ResponderEliminarA pesar de que para mi gusto le falta ese toque monstruoso, marciano, robótico, guerrero o ninja, el concepto es bastante raro de por sí, lo que la convierte en una pieza muy bonita y atractiva.
La caja, la ropa, los accesorios... Se nota que está hecha con cariño y además en las fotos da una sensación de calidad a pesar de no ser obra de ningún fabricante de juguetes conocido. Una buena compra sin duda.
Casualmente, hace un par de semanas, en un pueblecito de Portugal, en una tienda tipo bazar que vende de todo y que ya tiene sus años, vi en el escaparate varios juguetes de finales de los 90 de marcas digamos famosas mezclados con otros tipo bootlegs. Entre ellos había una muñeca ninja estilo Barbie muy curiosa, con ropa de tela y accesorios de plástico (con la caja un tanto descolorida por el sol y el paso del tiempo), pero cuando fui a entrar para comprarla (junto con algún que otro juguete más que se podía apreciar a través del cristal) estaba cerrada. Era raro porque según indicaba el horario, en ese momento debería estar abierta. Esperé un poco por si aparecía el dueño, pero nada. Encima creo que no costaba más de tres euros. Ojalá tenga más suerte la próxima vez que vuelva...
Si, yo también prefiero todo aquello que pueda englobarse en el terror, los monstruos o la ciencia ficción, y dentro de la ambientación histórica lo mío son los piratas, pero a veces te encuentras con algo que sin saber muy bien por qué te llama, y no puedes dejarlo pasar.
EliminarLa figura tipo Barbie vestida como una ninja podría ser una Lady Ninja de ABC Toys, bastante rara de ver hoy en día. A mi me pasó algo parecido en el puerto de Tarifa. Vi en un escaparate de una tienda cerrada un juego de mesa antiguo, descolorido y cubierto de polvo, un sábado por la noche, y zarpábamos el lunes a las cuatro de la madrugada. Siempre llevo un folio doblado y un lápiz en el bolsillo, así que le escribí una nota la dueño y se la pasé por debajo de la puerta de la tienda dándole mi numero de teléfono y rogándole que se pusiera en contacto conmigo pasadas dos semanas (que era la siguiente parada en tierra que teníamos prevista) para buscar un modo de comprarle el juego y que me lo enviara a casa por correo. Me llamó el domingo a la 10 de la noche diciéndome que se había acercado a la tienda a recoger una cosa que se le había olvidado allí y había encontrado la nota, que si me pasaba por la tienda en media hora o así me esperaba. ¡Corriendo para la tienda como si me persiguiera una estampida de rinocerontes! No se cuanto tardé, pero el hombre me esperó y volví al barco con el juego bajo el brazo. Conclusión... hay que llevar un papel y un lápiz (boli no, que revientan con el calor) encima en todo momento.
No, no era una Lady Ninja, no era tan molona como esa figura. Esta era más modosita...
EliminarSobre la historia que cuentas, me ha encantado. Yo también pensé dejarle alguna nota al vendedor, pero por el idioma y demás, preferí esperar a volver otro día. Espero que si la muñeca lleva ahí más de 20 años, aguante algún que otro mes más hasta que yo vuelva. En fin, ya te contaré. ;-)
Sea quien sea nuestra ninja misteriosa, espero que termine en tus manos y verla comentada en breve en tu blog ;-)
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