EL TEMPLO DE LOS PERGAMINOS ¡ALERTA DE EXPOILERZ!
Presentado por… el profesor Plot.Saludos, ávidos lectores.
Probablemente Diez negritos sea la obra de Agatha Christie más imitada. La historia de un grupo de personas atrapada en un lugar, que van muriendo de forma especifica dependiendo de su carácter, sus defectos, o los actos de su pasado, se ha repetido hasta la saciedad. Muchos bolsilibros de terror recrean una situación similar. Este es uno de ellos.
Diez personas
son convocadas a la magnífica y aislada mansión de Cutson´s Hills. El propietario
de la misma y dueño también de una inmensa fortuna, Hyram W. Koldikutt, ha
muerto y va a procederse a la lectura de su testamento. De entre los herederos,
siete son familiares del difunto en diversos grados, y otros tres no. Y entre
estos tres, hay dos (a los que identificamos rápidamente como nuestros
protagonistas y guías a través de la trama) que ni tansolo recuerdan haberse
cruzado con el sr. Hyram en toda su vida.
El ambiente
durante la lectura ya es extraño de por sí. Exceptuando a nuestros dos
cicerones, Bat Bludin y Marion Ford, que no conocían al finado, los únicos presentes que
parecen lamentar la muerte de este son su servidumbre. El resto solo están
impacientes por ver que les ha tocado en el reparto, como buitres volando en círculos
sobre un animal moribundo.
La lectura del
testamento es una especie de burla. A través de la boca del abogado, el difunto
acusa a todos sus familiares (y al novio de su hermana) de haber conspirado para matarle. Les deja en herencia,
a pesar de ello, una buena cantidad de dinero a cada uno, pero esta es mucho
menor de la que ellos esperaban, y está condicionada. Cobrarán esa herencia únicamente
“si son capaces de abandonar sus costumbres”. A Bat y Marion les deja
también un monto importante, pero menor, e incluso su mayordomo Elphyns y su criada Fay reciben una cuantiosa
suma a pesar de no haber sido citados específicamente para la lectura.
A partir de aquí la cosa se tuerce. Otra de las condiciones del testamento es que los herederos deben cavar una fosa en las tierras que circundan la mansión y sepultar ellos mismos el ataúd.
Al ir a la sala donde se encontraba este, descubren que el
cadáver de Hyram ha desaparecido, Elphyns ha sido ahorcado, el puente de
piedra que representaba el único acceso a la mansión vuela por los aires, y la línea
telefónica se corta.
Los ocho herederos acusados por Hyram de asesinarlo van cayendo de formas horribles, mediante trampas pensadas para matar a cada uno de ellos en particular. Una amiga de lo ajeno se aleja del grupo con la intención
de robar la cubertería de oro del difunto, sabiendo donde se guarda. Y al abrir
el cajón adecuado, una trampa de escopeta le descerraja dos cartuchos a bocajarro, prácticamente
partiéndola en dos. Otro, un pésimo músico, es acribillado por un arma similar
oculta en el piano de la casa, que de los presente solo él sabía tocar. Así van
cayendo uno tras otro.
Nuestros
protagonistas no están realmente a salvo. Aunque Hyram especificaba en su
testamento que ellos no debían preocuparse,
pues nada tenía en su contra, lo mismo decía sobre Elphyns y ha sido el primero
en morir. ¿Hay, por tanto, otro asesino entre los presentes haciendo
su propia criba, añadiendo muertos a los que puedan caer o no por
las trampas personalizadas dejadas por Hyram?
Veremos todo tipo
de intentos de abandonar la mansión y todo tipo de actitudes. Los hay que solo quieren
seguir vivos y los que insisten en llevarse su parte, o incluso más. Veremos desaparecer
el cadáver de Elphyns tal como desapareció el de Hyram (¿Estaban muertos en
realidad?) y perderemos de vista al abogado que leyó el testamento (¿Dónde se
ha metido ese tipo?).
¿Quién será el
culpable? ¿El abogado? ¿El mayordomo? ¿El mismo difunto? ¿Uno de los herederos?
¿El gato? ¿Varios de los anteriores actuando juntos o por su cuenta? Preparad
café amigos, porque esta va a ser una noche muy larga.
Puedes ver otro libro de este autor pulsando aquí.
Noche
de difuntos. 1975. Clark Carrados [Luís García Lecha] (texto) Fabá (portada).
Selección Terror nº 132. Editorial Bruguera S.A.
Creo que he borrado mi mensaje anterior antes de enviarlo...
ResponderEliminarComentaba que me parece muy interesante la trama y que me ha gustado mucho tu reseña, no solo porque el género es el que más me gusta, sino porque has dejado la incógnita al final sin revelar la solución al misterio.
Mientras lo leía me ha recordado a otro bolsilibro que reseñaste, ¿es posible que haya uno parecido?
No sé si lo he comentado alguna vez, pero yo descubrí "Diez negritos" gracias a la película "Identidad". La peli me encantó y cuando vi que estaba basada en un libro lo quise leer. Cuando lo empecé a leer me decepcioné porque yo me esperaba lo mismo que en la peli, pero cuando vi que lo que cogían era la esencia ya me centré en el libro y lo disfruté mucho. A partir de ahí, me hice con todos los libros de Agatha.
Pues sí que debe haberse borrado, porque este es el primer comentario que recibimos. Parecidos a este, de lo que a mí me gusta llamar "historias de herencia con bicho" he comentado ya "Doce días de horror", "Seis cadáveres en potencia", y puede que alguno más.
EliminarLo de "Identidad" no me suena que lo comentaras ya, pero estoy deacuerdo en que lo que debe mantener una versión o una obra derivada de otra, es la esencia, el corazón, la intención, o como quiera llamársele, y que la absoluta fidelidad al original no es tan importante como mucha gente dice.
En el último mercadillo por el que pasé (ya hace muchos, muchos meses de eso) hice acopio de libros de Agatha que tengo en mi montón de libros para leer este año.