EL TESORERO

 EL TEMPLO DE LOS PERGAMINOS                                                                                 ¡ALERTA DE EXPOILERZ!

                                             Presentado por… el profesor Plot.

 

Saludos, ávidos lectores.

En la antigua Grecia, cuna de la política, se pensaba que esta ocupación era la más noble y elevada de las actividades humanas, y que aquellos que la ejercían eran ciudadanos de incuestionable virtud y honradez. Claro que, en la antigua Grecia, los políticos no cobraban más que un pequeño sueldo simbólico, y debían mantenerse a sí mismos por otros medios. Todo el trabajo que hacían analizando los problemas de la población y debatiendo sus posibles soluciones era básicamente un voluntariado. Actualmente estamos viviendo la situación contraria: los sueldos de los políticos son  absurdamente elevados para lo poco y mal que trabajan en líneas generales. Habrá excepciones, como las hay en todo, pero da la impresión que la mayoría de los que se meten en política lo hacen exclusivamente por el dinero y el poder, y no tienen un interés real en la buena marcha del país.

Los políticos y sus trapicheos han sido tratados en varias ocasiones por ese gran y valiente critico social que es Ibáñez, cuyos tebeos se mantienen en un difícil punto de equilibrio entre el puro humor y la sátira feroz. En esta ocasión, y aunque en ningún momento llega a referirse a él por su nombre, repasaremos un comic dedicado a Luís Bárcenas, uno de esos delincuentes con traje y corbata que abundan más que nunca.

El tesorero del PP (Partido Papilar), ha estado robando mucho más de lo que ya se ha llegado a considerar normal en su partido. ¡Ha robado tanto al país que no ha dejado nada para que puedan robar los demás! Mortadelo y Filemón reciben el encargo de encontrar pruebas en su contra. Para ello, tendrán que infiltrarse en varios edificios en busca de los papeles, listas de pagos, y registros de todos los chanchullos que el tesorero se traía entre manos. Eso los obligará a lidiar, entre otras cosas, con porteros que tienen más de gorila de discoteca que de servicial conserje, porque vivimos en uno de esos países donde los delincuentes tienen guardias de seguridad para defenderlos de la gente horrada.

El tebeo es de 2015, dos años después de que los juicios por corrupción de Bárcenas y sus amiguetes comenzaran, y había tanto por lo que juzgarles que todavía no han acabado con todo. Al no haber una conclusión oficial en el momento de publicarlo, tampoco Ibáñez se la dio. El final es el clásico en el que las pruebas que Mortadelo y Filemón encuentran no son lo que parecían y no pueden acusar de nada concreto a los altos cargos que han detenido con su delicadeza habitual, con la consiguiente furia y persecución (revolver en mano) por parte del Superintendente. Pero llegados a este punto, las risas ya están echadas.

Hay veces que los delincuentes se burlan de la justicia y de la gente. El propio Bárcenas hacia el gesto de “que os jodan” a las cámaras de televisión (y a todo espectador que estuviera observando la pantalla) cada vez que le enfocaban. Y para compensar en parte eso, hay tebeos como este, para que podamos seguir riéndonos de tales personajillos hasta el fin de los tiempos. Y, sobre todo, y más importante, para recordar lo que hicieron, porque la mayoría de ellos se las apaña para seguir en política a pesar de todo.

Más Mortadelo y Filemón pulsando aquí.

El tesorero. 2015. Francisco Ibáñez Talavera (guion y dibujo). Publicado en 2016 por Ediciones B.