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lunes, 2 de enero de 2023

VARITA DE CHOCOLATE DE HARRY POTTER

 LA DESPENSA

Presentado por… el sr. Peppin.

¡Saludos, hambrientos y hambrientas!

Y por fin, el cuarto regalo que nos trajo Papá Noel estas Navidades (podéis ver el resto en las tres últimas entradas de La Despensa): una varita mágica de la saga Harry Potter hecha de chocolate. 

Esta imita concretamente a la del propio Harry. Es de chocolate con leche, así que no la podemos usar para lanzar hechizos, pero sí podemos comérnosla y recuperar las energías perdidas combatiendo a los dementores. Al parecer hay varios modelos de varita, correspondientes a algunos de los personajes principales.

Lo que más me ha gustado de este producto, es que incluye algo que podemos conservar una vez nos decidamos a comernos la varita: una lámina de cartulina con los movimientos de varita de cuatro de los hechizos propios de esta saga. 

En los libros de Harry Potter no es realmente necesario pronunciar palabras mágicas o hacer gestos específicos para lanzar hechizos, ni tan solo es necesaria una varita, en realidad. Todo eso son ayudas al hechicero. La varita permite un mayor control de la magia interna del individuo, de forma que este pueda canalizarla y proyectarla con más facilidad. Del mismo modo, las palabras mágicas y los movimientos específicos de varita actúan como una especie de regla nemotécnica que permite al hechicero concentrarse y enfocar su mente en lo que pretende hacer. Los magos de mayor poder o más experimentados son capaces de lanzar hechizos sin pronunciar palabra, sin mover un milímetro la varita, o incluso lanzarlos sin varita, así como volar sin escoba. Sin embargo, la mayoría necesitan las varitas, palabras y movimientos, o bien estos les suponen una mejora considerable en sus posibilidades de lanzar correctamente los hechizos. 

Pues bien, en la lámina que acompaña esta varita encontramos los movimiento específicos de cuatro hechizos. En cada gráfico el punto indica la posición inicial, a partir de la cual debe trazarse en al aire el símbolo o runa completo, siguiendo el orden indicado por las flechas. 

Wingardium leviosa (recordad que se pronuncia leviooosa, no leviosaaa) permite volver ingrávido un objeto y desplazarlo en el aire a voluntad mientras lo estemos apuntando con la varita o bien manteniendo la concentración. 

Tarantellegra fue en teoría fue desarrollado como una forma de eliminar del cuerpo el veneno de araña, provocando en el objetivo una serie de espasmos que le hacían exudarlo. Su uso se ha popularizado como una forma de ataque no letal, porque si el receptor es un ser vivo con piernas, moverá estas de forma incontrolable. Además de dificultarle mucho su estabilidad y posibilidades de desplazarse, esto le agotará rápidamente. Curiosamente afecta también a los objetos inertes. Si el objeto tiene algo parecido a piernas (como las patas de una silla o una mesa) estas se moverán haciendo que el objeto “baile” frenéticamente. Si el objeto carece de patas, el hechizo hace que empiece a dar botes de un lado a otro, pero sin que sea posible controlar su movimiento en ningún caso. En ocasiones tiene efectos del todo inesperados, como cuando un mago intentó hacer bailar al monte Vesubio en el año 79 d.c. y provocó su transformación en un volcán activo.

Mimblewimble es un hechizo de quinto año conocido también como “maldición de la lengua atada”. Su efecto es hacer que al objetivo se le trabe la lengua cada vez que intente hablar durante el tiempo de duración del hechizo. En medio de un combate a hechizos, esto priva al oponente de la posibilidad de pronunciar los hechizos que lanza, reduciendo mucho las posibilidades de llevarlos a cabo correctamente. 

Y terminamos con Stupefy, otro hechizo de quinto año. Genera un rayo luminoso rojo muy intenso que provoca en el objetivo un fuerte aturdimiento. Generalmente derriba a la víctima y la deja inconsciente durante varias horas. Incluso si el objetivo resiste este efecto, es probable que quede atontado un buen rato. En algunos casos extremos provoca daños neuronales a largo plazo.  

Además de instructivo, va muy bien como marcapáginas para la próxima vez que nos leamos los libros. ¡Este año nos toca releer Harry Potter y la cámara secreta!

Puedes ver otro articulo relacionado con Harry Potter pulsando aquí.

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