LA ISLA DE LOS HOMBRES PECES

 EL ORÁCULO DE LAS VISIONES                                                                                      ¡ALERTA DE EXPOILERZ!                                                                                                                                                                       

 Presentado por... Pecky.

¡Saludos, amigos cinéfagos!

Vamos con una peli de acción pasada por agua (salada), que ya tenemos otro veranito encima y el verano es esa época del año donde deberían primar las aventuras, romances y monstruos marinos. Al menos, a nivel cinematográfico.

Estamos en 1891, en alguna parte del Caribe. En un bote a la deriva, perdido en un banco de niebla, ocho hombres magullados y agotados charlan sobre su destino. Todos ellos salvo uno son presos. Por las palabras que cruzan, nos enteramos que el barco en el que viajaban camino del penal ha naufragado. Los presos, encadenados fueron abandonados a su suerte por los marineros, pero un teniente médico se retrasó para liberarlos y que no se hundieran junto con el barco. A consecuencia de ello, ahora comparte bote con los siete presos, que no parecen estarle muy agradecidos.

Algo golpea el bote y piensan que pueda ser un tronco, pero se trata de extrañas criaturas anfibias que destrozan el fondo. El bote se hunde rápidamente, y la corriente arrastra a la mayoría hasta una isla, aunque los dispersa a lo largo de la playa. 

El teniente despierta solo, y en su deambular por la isla va encontrándose a los demás. Al primero de ellos lo encuentra ya muerto. La isla es volcánica, y se ha envenenado al beber de un manantial de agua sulfurosa. Cuando todos se reúnen, descubren que la isla está (o estuvo) habitada. Uno de ellos que se aleja del grupo en busca de comida es encontrado luego destrozado, flotando en una laguna. Otro cae en una trampa de foso llena de estacas y queda ensartado en ellas. Solo el teniente y dos de los convictos logran llegar hasta una hacienda, donde son recibidos por el profesor Rackan. 

El profesor gobierna sobre la isla como un rey. Tiene a todos los nativos a su servicio, principalmente por influencia de Shakira, la sacerdotisa vudú de la tribu que también le sirve en la hacienda como ama de llaves. Además de Shakira, con el profesor vive su mujer Amanda (interpretada, por cierto, por Barbara Bach, portada de Playboy y esposa de Ringo Starr, uno de los Beatles).

Rackan acoge en su casa al teniente y también a los reclusos (sabiendo que lo son) sin mostrar preocupación por ello. Durante la noche Amanda abandona sola la hacienda y uno de los presos, Peter, la sigue furtivamente con intención de violarla. Le pierde la pista al seguirla por el bosque, y no llega a ver lo que sí se nos revela a nosotros, como espectadores. Amanda llega hasta la playa y se adentra en el mar hasta la cintura. Del agua brotan unos monstruos, una mezcla de peces y reptiles antropomorfos, que se acercan a ella y la rodean. Pero no la atacan, sino que tienden hacia ella sus garras puestas en forma de cuenco, en actitud suplicante. Amanda vierte en las garras de cada uno de ellos un liquido que trae en una botella, que los seres se apresuran a beber. Una vez la botella se vacía, uno de los seres lo agradece acariciando con delicadeza los cabellos a Amanda con su garra llena de uñas afiladas, y todos los seres vuelven a sumergirse.

Durante el camino de regreso a la hacienda, Peter intercepta a Amanda, pero no llega a dañarla. Al perseguirla por un manglar, de esta brota uno de los seres que atrapa a Peter y acaba con él para defender a Amanda. El otro preso desaparece tratando de apoderarse del Enterprise, el barco del profesor. Amanda, que parece sentir cierta atracción por el teniente, le recomienda a este que fabrique una balsa y pruebe suerte volviendo al mar, porque ahí al menos tendrá una posibilidad de sobrevivir que en la isla no encontrará.

A partir de aquí la cosa se complica. Hasta este momento todo apuntaba a otra versión de La isla del Dr. Moreau, con el profesor Rackan dedicándose a convertir humanos en peces o viceversa. Pero Rackam decide quitarse la careta y revela al teniente la verdad. Le ha permitido vivir porque necesita sus conocimientos de medicina para mantener vivo a otro científico que está colaborando con él, y se halla gravemente enfermo. Este resulta ser el padre de Amanda, que no es la esposa de Rackam aunque él la presentara así. La isla en la que están es la cima emergida de lo que en otro tiempo fue un continente. A quinientos metros de profundidad hay un templo repleto de tesoros, que solo los hombres-pez, descendientes de los habitantes de ese continente ahora sumergido, son capaces de recuperar. Amanda lleva en la isla desde que era una niña, y ha aprendido a comunicarse con los hombres-peces. Ella cree que el líquido que regularmente les proporciona es una medicina que les ayuda a vivir, pero en realidad es una droga elaborada por su padre para controlarlos.

El teniente finge colaborar, pero la historia de Rackam no le cuadra del todo y hace sus propias averiguaciones. Termina por descubrir que en realidad los hombres-peces no son lo que le han contado, sino humanos mutados artificialmente por Rackam y el padre de Amanda con el único fin de recuperar el tesoro. Cuando esté todo en su poder, Rackam tiene la intención de acabar con ellos, al igual que con sus siervos nativos, el padre de Amanda y el teniente. A Amanda se la llevará en su barco junto con el tesoro, porque ya no tiene nada de niña y ha terminado encaprichándose de ella.

Naturalmente, todo se complica. El padre de Amanda muere sin haberle revelado a nadie como se prepara la droga que mantiene dóciles a los hombres-pez. El volcán tiene erupciones cada vez más frecuentes y violentas, y amenaza con destruir la isla de un momento a otro. Shakira planea sustituir a Amanda en el corazón y la cama de Rackam cuando este abandone la isla. Ante tal pretensión, Rackam, que ya está perdiendo los nervios y la cabeza, dispara contra Shakira y sus sacerdotisas, predisponiendo contra él al resto de sus sirvientes nativos. Y por si esto no bastara, la falta de droga vuelve incontrolables a los hombres-pez. En medio del caos reinante, el teniente y Amanda tratarán de salvarse el uno al otro mientras la tierra tiembla y el volcán arroja ríos de lava, los hombres-peces y los nativos se matan entre ellos, y Rackam se dedica a disparar a todo lo que se mueve. 

Para mí gusto, este tipo de películas rayan la perfección: básicamente de acción pero con un misterio a desentrañar, algo de romance, monstruos, civilizaciones perdidas, y tesoros fabulosos. Es lo que toda película de aventuras debería ofrecer.

L'isola degli uomini pesce. 1979. Sergio Martino, Cesare Frugoni, Sergio Donati (guion) Sergio Martino (dirección) Claudio Cassinelli, Richard Johnson (actores principales) Barbara Bach, Berly Cunningam (actrices principales) Dania Films & Meduza Produzione.