EL TEMPLO DE LOS PERGAMINOS ¡ALERTA DE EXPOILERZ!
Presentado por… el profesor Plot.
Saludos, ávidos lectores.
Este es uno de los libros pendientes de nuestro Reto Literario 2023, que tenemos bastante olvidado y muy retrasado. Ciñéndonos al reto deberíamos haberlo leído y reseñado en junio, cubriendo así el punto de "un libro que haya ganado un premio importante" (en este caso, el Hugo de 1972) pero a veces las cosas se hacen cuando se puede, no cuando se quiere. Vamos a intentar retomar la lista de lectura y dejarla lo más completa posible antes que termine el año.
Originalmente, A vuestros cuerpos dispersos iba a ser una novela única. El autor se emocionó desarrollando el mundo que había creado, se le escapó de las manos, y terminó reestructurándolo como una trilogía. El tercer libro resultaba tan largo que lo dividió en dos, y posteriormente añadió un quinto libro para terminar de atar cabos. Incluso después de cerrada la trama escribió un sexto libro y aceptó como canónicos una serie de relatos cortos del Mundo del Rio escritos por otros autores (recopilados en dos libros más😅), en los que estos pulían detalles que el propio Farmer había olvidado aclarar o había renunciado a tratar de explicar.
Una de las cosas que caracterizaban a Farmer, es que solía “tomar prestados” personajes inventados por otros autores para sus relatos. Escribió libros en los que aparecían como protagonistas Sherlock Holmes, Tarzán, Willy Phineas Fogg, o Doc. Savage, entre otros. En la saga del Mundo del Rio, recurre a personajes históricos reales.
El libro nos narra un extraño experimento llevado a cabo por una raza alienígena desde el punto de vista de los principales afectados por este: la humanidad.
La práctica totalidad de los millones de seres humanos que murieron desde la prehistoria hasta el 2008 (el año en que la humanidad fue aniquilada por una máquina de guerra llamada El Barredor) son replicados en un planeta artificial. Casi todos los “recreados” aparecen con veinticinco años en cuerpos perfectamente sanos. Cualquier enfermedad o malformación de nacimiento o adquirida que pudieran tener ha sido curada o corregida. Los que murieron con menos edad que esa aparecen con la edad que tenían en el momento de morir, pero nadie que muriera con menos de cinco años es recreado, ni tampoco los que nacieron con algún retraso mental. Todos están también desnudos y completamente lampiños, aunque no tardan en descubrir que el cabello les va creciendo a su ritmo normal.
Los humanos así recreados pertenecen a todas las razas, culturas y épocas posibles, y aparecen de forma aleatoria a lo largo de las orillas del rio que constituye casi todo su mundo. El planeta que se ha fabricado para ellos consiste en un ancho y caudaloso rio. Este se extiende de norte a sur a lo largo de todo el mundo, con unos pocos kilómetros de llanos y colinas a cada lado, que terminan en una barrera de montañas casi verticales, altísimas y aparentemente infranqueables.
Tras el comprensible caos y perplejidad inicial, la gente comienza a organizarse en grupos afines, cada uno buscando protección entre los que hablan su mismo idioma o tienen costumbres o culturas similares, o simplemente uniéndose a cualquier grupo cercano que les acepte. Porque naturalmente, en ese mundo y esa sociedad recién estrenadas aún no hay leyes, y los primeros asesinatos no tardan en producirse. Robarle a otro la herramienta de piedra y madera que acaba de fabricar es más fácil que fabricarse una propia, y ocupar la cabaña construida por otro conlleva menos trabajo que levantar una desde cero.
En El Mundo del Rio hay pequeños animales carroñeros cuya función es hacer desaparecer los cadáveres y mantener limpio el suelo y el rio de desperdicios, pero ni estos ni las escasas plantas sirven de sustento. La comida se obtiene por medio de unos cilindros metálicos similares a gruesos portaplanos que se ha proporcionado a los recreados. Cada persona despierta con uno de estos cilindros junto a él. A base de prueba y error descubren que estos cilindros son personales, de forma que únicamente su propietario puede abrirlos y cerrarlos. A lo largo de las orillas del rio hay una serie de grandes rocas con orificios en las que estos cilindros se pueden encajar. Una vez al día, con una regularidad inmutable, estas rocas liberan una energía que recarga los cilindros haciendo que estos, cual Cuernos de la abundancia, generen recipientes con comida y bebida variadas. El menú diario se compone de alimentos típicos de una cultura aparentemente aleatoria, y siempre incluye licor, tabaco, drogas, rollos de papel higiénico y ropas muy básicas como toallas y faldellines.
El que estos puntos de recarga estén en su mayoría cerca del rio y la presencia de las aparentemente inaccesibles montañas parece indicar que quien les puso ahí quiere mantenerlos concentrados en esa área tan específica. A esto se une el hecho de que los únicos materiales de construcción de los que disponen son piedra, fibra vegetal y madera. No hay metales en cantidades tan significativas como para poder fabricar herramientas, armas o vehículos con ellos. Los que devolvieron la vida a la humanidad, la querían en un estado de desarrollo industrial bajo.
Además de metales, lo que tampoco se proporciona a los cobayas son explicaciones ni instrucciones. No saben que hacen allí y muchos quieren ver en lo ocurrido la confirmación de que sus respectivas religiones estaban en lo cierto, o crean nuevas religiones sobre la marcha para ajustarse a esa nueva realidad. Otros analizan la situación con aire crítico, tratando de entender lo que está ocurriendo. Y los hay a los que simplemente no les importa en absoluto y se limitan a vivir explorando las posibilidades y limitaciones de ese nuevo mundo.
No tardan en descubrir que la recreación está plagada de errores, o quizá de omisiones voluntarias: todas las mujeres son vírgenes sin importar si murieron siéndolo o no, y también todas son estériles. Todos los hombres están circuncidados aunque no sufrieran esa mutilación en vida, y no les crece la barba. Y hay otra cosa más. Cada vez que alguien muere, reaparece pocas horas después junto con su cilindro en otro punto aleatorio del Mundo del Rio. No solo no hay nacimientos, sino que tampoco hay muertes permanentes. Los cuerpos reaparecen siempre como la primera vez que lo hicieron, pero se conservan los recuerdos de lo vivido.
El protagonista principal es sir Richard Francis Burton, un famoso explorador, cartógrafo, traductor y militar ingles del que se sabe que hablaba con soltura al menos veintiocho idiomas, muerto en 1890. La biografía del Burton real, si la buscáis, es impresionante. Este primer libro abarca sus vivencias durante los primeros doce años de existencia en el Mundo del Rio. Debido a un error en su proceso de recreación, Burton despierta antes de que la primera hornada de humanos artificiales sean dejados en el Mundo del Rio. Contempla los millones de cuerpos alineados, algunos de los cuales todavía están siendo fabricados, tendiendo musculatura sobre sus huesos y cubriéndolos con capas de piel. Tiene ocasión de ver brevemente a un par de técnicos alienígenas controlando la producción en masa de cuerpos, y todo esto le hace comenzar con una idea mucho más clara que el resto de lo que está ocurriendo.
A él se van uniendo otros como Kazz, un cavernícola caníbal de la prehistoria. Alice Liddell, la persona real que inspiró a Lewis Carroll a escribir Alicia en el País de las Maravillas. Monat, un alienígena (de una raza diferente a la que está llevando a cabo el experimento), que fue quien activó El Barredor sin haberlo regulado correctamente antes, y algunos más.
Explorando ese nuevo mundo, deslizándose rio con una rudimentaria embarcación, Burton y el cambiante grupo de aquellos con los que va compartiendo su viaje descubren que al parecer se hizo un intento de poblar el rio siguiendo un orden. Hay zonas en las que casi todas las personas que aparecieron juntas pertenecen a una misma época o etnia, pero también otras donde todas las épocas y culturas están revueltas. Encuentran sociedades enteras que han acotado zonas del rio y las orillas como suyas, matando o esclavizando a todo el que pasa por ellas. Encuentran otras donde los seres más dispares han hallado una forma de convivir, hasta el punto de crearse nuevos idiomas que no son otra cosa que la mezcla de los que hablaban originalmente. Descubren que entre los recreados hay alienígenas infiltrados, con apariencia de humanos, a modo de observadores de campo. Logran incluso identificar y capturar a uno de ellos, pero este se suicida antes de haber revelado nada que ellos no hubiesen teorizado ya.
A medida que más gente va enterándose de la presencia de estos seres se crea una nueva religión en torno a ellos, a los que se denomina Los Éticos. La creencia más extendida es que Los Éticos han otorgado la juventud y las resurrecciones eternas a los humanos para que, junto a la falta de avances y lujos materiales, estos alcancen un estado de elevación moral y espiritual que les permita trascender a su siguiente escalón evolutivo.
Sin embargo, más tarde un Ético renegado se pone en contacto con Burton y le revela la verdad: no hay ninguna buena intención tras las acciones de los Éticos. Todo lo ocurrido no es más que un experimento social, una forma de recabar datos estadísticos sobre el comportamiento de otras razas y sociedades. Cuando el experimento termine y ni el entorno ni los cobayas sean necesarios, simplemente se limpiará el laboratorio y se desharán de ellos. A Burton también se le ha revelado, por medio de visiones, que en el Polo Norte (donde tiene su origen el rio) hay un misterioso lugar, La Torre Oscura, en donde se guardan todos los secretos del Mundo del Rio.
Burton muere en un par de ocasiones, y como todos en este lugar, reaparece poco después. Pero al hacerlo en un lugar aleatorio y sin nada encima, salvo el cilindro de comida, cada vez que esto ocurre pierde todas las amistades y objetos que tuviera, siendo ínfimas las posibilidades de reencontrarse con los conocidos a corto o medio plazo entre los treinta y cinco mil millones de resucitados. Entre estos hay quienes se suicidan para escapar de situaciones comprometidas, sabiendo que probablemente reaparecerán muy lejos.
El propio Burton se suicida en cientos de ocasiones a lo largo de los años, utilizando estas secuencias de muerte y resurrección como una forma rápida de viajar de un lugar a otro del rio, un teleportador aleatorio que le permite ir conociendo cómo ha evolucionado la situación en diferentes lugares e ir recopilando información de todas partes. Por mero azar, al final reaparece en un punto muy cercano al Polo Norte del planeta.
Allí otros Éticos se ponen en contacto con él para advertirle que el Ético renegado le ha mentido porque está llevando a cabo su propio experimento, y que el verdadero fin último del Mundo del Rio es el que predican los creyentes de la religión formada en torno a ellos. Los Éticos advierten también a Burton que cada resucitado tiene un número limitado de vidas disponibles, y por la forma en la que ha abusado de su sistema de traslado rápido mediante suicidios, él se encuentra ya peligrosamente cerca del suyo. Los Éticos tienen su discurso bien preparado, pero no contestan a las preguntas concretas que Burton les hace.
Burton y algunos otros resucitados suponen que La Torre Oscura es algún tipo de base o centro de control desde el cual Los Éticos dirigen el experimento, y deciden tratar de llegar hasta ella. La forma en la que pretenden hacerlo es de lo que trata el siguiente volumen de la saga: El fabuloso barco fluvial.
Es una lectura interesante aunque pesada. Hay demasiados personajes contando sus historias, y se vuelve demasiadas veces sobre los mismos temas. La idea base me parece genial, una situación a la que se puede sacar mucho partido, pero el desarrollo se me ha hecho excesivamente lento.
To Your Scattered Bodies Go. 1971. Philip José Farmer. Editado por La Factoría de Ideas en 2007.
Qué casualidad, el mismo día que públicas esta entrada había recogido un libro de relatos de cifi con el nombre del autor bien grande (aunque es una recopilación de historias cortas de diferentes autores) tengo que mirar bien qué es lo que trae. Lo leeré con interés o buscaré esta otra saga, porque lo que cuentas de este libro me ha parecido muy bueno, me ha recordado en parte a lo que comenté hace poco de El problema de los tres cuerpos, o la historia esa de la casa de las escaleras por la forma en la que se consigue la comida. Saludos!
ResponderEliminarTengo que ponerme al día tanto en mis propias lecturas del reto como en los comentarios que estáis haciendo los demás sobre las vuestras. Estoy muy desconectado de todo esto últimamente 😓
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