RAPE ZOMBIE 3. Apocalipsis final

 EL ORÁCULO DE LAS VISIONES                                                                                      ¡ALERTA DE EXPOILERZ!                                                                                              ¡¡¡ALERTA DE EXXXTREMERZ!!!                                                                                                                                                                   

 Presentado por... Pecky.

¡Saludos, amigos cinéfagos!

La tercera y por lo que a nosotros respecta última de las películas de esta extraña saga que comentaremos (porque no tenemos más) es la más corta de todas. Tiene una duración de una hora y siete minutos, pero la introducción que acompaña a los créditos iniciales (imágenes salteadas de noticieros donde se muestra la caída del mundo) es simplemente la misma que usaron en la entrega anterior, y el inicio de la película como tal es un resumen de las dos anteriores. Entre una cosa y otra, quitando el metraje reciclado, los créditos iniciales y finales, y una actuación musical metida con calzador a mitad del metraje, Rape Zombie 3 nos ofrece menos de cincuenta minutos de historia.

Esta vez comenzamos en el campamento de las militares. Nozomi (la enfermera superviviente de la primera película, enamorada de Momoko) ha clonado al monje del templo en el que se refugiaron. Este murió en la primera película, convertido en zombi y luego volado en pedazos, pero Nozomi debió recuperar uno de esos pedazos y a partir de este ha clonado al monje a modo de experimento, solo que privándolo de órganos sexuales, lo que debería evitar que se transformase en un zombi.

Por otra parte, vemos como las soldados se están aprovechando de las civiles a las que han salvado. Al carecer ya de gobierno, las militares no han tardado mucho en convertirse simplemente en personas con armas. El agua está restringida y las civiles se duchan en grupos con el tiempo cronometrado, bajo la atenta mirada de las soldados. Estas aprovechan que las ven desnudas para elegir a las que más les gustan y acostarse con ellas. Los uniformes ya no significan nada, y los rangos cada vez menos. La disciplina se pierde muy rápidamente y las soldados y científicas empiezan a pelearse entre ellas por el control sexual de las civiles.

Se nos muestra ahora que, además del zombi parlanchín y el clon castrado del monje, las científicas tienen otro experimento en marcha, un zombi que no se muestra agresivo hacia las mujeres y que por algún motivo, en lugar de gruñir o hablar, rebuzna. Las científicas lo estudian tratando de averiguar el motivo por el que no trata de violar a las mujeres, por si pudiera hacerse extensible al resto de zombis. 

Aprovechando que la esposa de Shinji sale de su habitación un momento, una de las refugiadas, llamada Karen la cortita, se cuela en ella. Es posible que Shinji sea el último hombre normal que tenga la oportunidad de ver, y quiere acostarse a toda costa con él. Sus nada sutiles intentos de seducirle hacen que sus niveles de testosterona suban tanto que incluso él, que parecía uno de los pocos inmunes al virus zombi, se transforme y la ataque. Las militares llegan a tiempo de salvar a Karen la cortita y amarrar a Shinji a una camilla, pero la pérdida del único hombre inmune al que han podido echar mano supone un revés para sus investigaciones.

En el Imperio de Akiba, La Reina Momoko ha salido de su trance para dar un alegre concierto de k-pop a sus tropas, que se están preparando para atacar a las militares. El tuerto y T101 mantienen la vigilancia sobre ellos y continúan divagando sobre las posibles causas de todo ese asunto, pero la conversación de él va tornándose cada vez mas amenazante. Revela estar en contra de cualquier intento de detener lo que sea que esté ocurriendo, puesto que la idea de la evolución humana lo obsesiona, y cree que Momoko, su bebé de luz y los zombis violadores son parte de esa evolución. Dándose cuenta que su informante ha pasado de ser una ayuda a ser un obstáculo potencial, T101 se prepara para eliminarlo y carga su rayo eléctrico. El tuerto le lanza entonces un cubo de agua que ya tenia preparado para esa situación provocando un cortocircuito que termina en una potente deflagración eléctrica. El edificio donde ambos se encuentran se colapsa y derrumba, aparentemente acabando con ellos.

El tuerto, por lo que se nos mostró en un flashback, estaba en contacto vía radio con Nozomi, y ésta estaba oyendo todo lo él y T101 se decían. Así se entera que Momoko sigue viva, y toma la decisión de rescatarla. Para ello despierta a cinco clones guerreras de Kanae (muerta también en la primera película) de la que al parecer igualmente se guardó un trozo. En lugar de avisar a las militares que los otakus se disponen a atacarlas, abandona el campamento llevándose a sus clones guerreras, y el clon del monje simplemente las sigue. La película es del 2013, un año posterior a Venganza, la quinta entrega cinematográfica de Resident Evil, y puede que todo el asunto este de los clones fuese una burla al uso tan absurdo que se hizo de ellos en esa otra franquicia, como una excusa para hacer reaparecer en distintos papeles a personajes que habían muerto en entregas anteriores.

El ejército otaku, haciendo marchar con ellos a todos sus zombis, se abalanza sobre el campamento y desborda rápidamente sus defensas. Aquí vemos otra referencia a esta saga en uno de los zombis que tiene una mutación que hace que su pene se divida en tentáculos con los que comienza violar a las mujeres de cuatro en cuatro. Esto seguramente sea una parodia de los zombis con tentáculos en las mandíbulas que aparecieron en la cuarta película de Resident Evil (Ultratumba, 2010).

Mientras el caos, los gritos y los gemidos se apoderan del campamento, Maki entra en el laboratorio donde el zombi de su marido permanece amarrado a una camilla y lo cabalga. Puesto que va a morir violada por un zombi antes o después, ella elige que sea el de Shinji quien lo haga. En el momento en el que siente los fluidos de Shinji derramarse en su interior, envenenándola, lo mata con unas tijeras, cayendo muerta a continuación sobre él.

Militares, científicas y civiles son violadas por los zombis mientras los otakus simplemente miran y se ríen… hasta que el zombi rebuznador del laboratorio que no atacaba a las mujeres se lanza contra ellos. Resulta que el motivo por el que no atacaba a las mujeres era porque estando vivo era gay. Esto podría ser otra burla a la película El día de los muertos de 2008, en la que aparece un zombi que no ataca a los protagonistas porque estando vivo... era vegetariano🤦‍♂️

Los otakus, sin testosterona suficiente para ni tan solo defenderse, son violados uno tras otro por el zombi gay, muriendo al igual que las mujeres violadas por el resto de zombis. Por si toda la situación no fuera ya bastante surrealista, en el ahora abandonado Imperio de Akiba, La Reina Momoko, con su hijo de luz en brazos, canta a un auditorio vacío un Ave María en latín. Y es la letra lenta y suave de ese salmo religioso, acompañado de una música dulce y melódica, lo que hace de banda sonora de todas las atroces escenas citadas anteriormente. Al final, en el campamento solo quedan los zombis arrastrando los pies de un lado a otro, sin propósito ya, entre los cadáveres envenenados de mujeres y otakus. Un delirio absoluto.  

En el Tokio devastado, T101 brota de entre las ruinas del edificio derrumbado. Entra al Imperio de Akiba sin encontrar a nadie que le plante cara y llega frente a La Reina Momoko, que permanece en el escenario ya en silencio, con su hijo de luz en brazos. T101 carga su ataque eléctrico para destruir a ambos seres, pero justo en ese momento aparecen Nozomi y sus cinco clones de combate para impedírselo.

Y cuando Nozomi le grita a T101 que deje en paz a Momoko porque ella la ama… el bebé de luz se echa a reír al tiempo que un primer plano del rostro de Momoko nos muestra que ella está a punto de romper a llorar. Esto probablemente también sea una referencia a la revelación final de Urotsukidoji (1987), cuando se descubre la verdadera identidad e intenciones del Chojin y el involuntario papel de su madre Akemi en todo el asunto.

¡Y fin! Aquí termina este capítulo, y como ya dije, que yo sepa los dos restantes no llegaron a venderse en España.

Puede que esta saga de películas no sea mas que un inmenso y mayoritariamente bochornoso y cutrísimo chiste de mal gusto, humor grosero y parodia del cine de zombis, pero de verdad que me quedo con las ganas de saber como termina la historia y que es en realidad el bebé de luz de Momoko. 

Puedes repasar esta saga desde el inicio pulsando aquí o ver más reseñas de películas de zombis en general pulsando aquí. 

Reipu Zombi, Lust of the Dead 3. 2013. Naoyuki Tomomatsu, Yuko Momochi (guion) Naoyuki Tomomatsu (director) Rina Aikawa, Yui Aikawa, Kazuyoshi Akishima, Asami Sugiura (actrices principales) Norman England (actor principal). Editada en DVD en 2013 por Redfilm.