EL TEMPLO DE LOS PERGAMINOS ¡ALERTA DE EXPOILERZ!
Presentado por… el profesor Plot.
Saludos, ávidos lectores.
En 2011 la editorial 23 Escalones hizo un intento de “resucitar” los bolsilibros, que se vino abajo después de solo tres números. No fue la primera y probablemente tampoco la última vez en que se ha tratado de recuperar este formato. El primero de los tres títulos que esta editorial llegó a publicar fue Revividos, de Ralph Barby, uno de los grandes bolsilibros clásicos de Bruguera. Los otros dos fueron historias nuevas.
Se vendían por 3´50€, que puede no parecer mucho así de pronto, pero por esas fechas los bolsilibros originales de Bruguera aún seguían encontrándose en mercadillos a 0´50€ o 1€ con relativa facilidad. Aún así, el verdadero motivo del fracaso de la colección creo que fue otro, que comentaré al final.
No podrás salir tiene lugar en Las Palmas de Gran Canaria (España). El protagonista único (sin la contrapartida femenina que era habitual en los bolsilibros) es Matt, un irlandés nacionalizado que trabaja de policía. Matt está investigando una serie de asesinatos que están teniendo lugar en las montañas de Las Palmas, en los que los cadáveres (o partes de estos, según el caso) desaparecen.
La investigación que Matt lleva a cabo es bastante simple. Los últimos asesinatos han tenido lugar en un viejo hospital abandonado en medio del monte, cerca del cual vive una familia en una caravana. La familia está compuesta por una horripilante mujer, su hijo completamente adulto y un nieto deforme al que tratan como un bebé pero tal como se nos describe (tiene fuerza suficiente para mantenerse firmemente agarrado a una cornisa) debe tener al menos diez años o ser un mutante al estilo de ¡Están vivos!
Ya de por sí el aspecto de la familia haría saltar las alarmas de cualquiera, más aún siendo los únicos que viven en la zona en la que se producen los asesinatos. Solo por las asquerosas condiciones de insalubridad en las que viven, el Departamento de Sanidad debería retirarles la custodia del niño y escolarizarlo o algo, pero Matt se limita a hacerle unas preguntas de rigor a la mujer y dejarlos estar.
A continuación va a hablar con un superviviente de un ataque anterior, que no llegó a ver a su agresor. Además está amargado por la experiencia sufrida y las graves heridas que recibió y se niega a ayudarle, como si Matt tuviera la culpa de lo que le ocurrió. Este superviviente parece que va a tener peso en la historia, ya que se nos habla bastante de él, pero resulta no tener ninguna relevancia.
Finalmente, en una conversación casual con su hija adolescente, esta le cuenta que hay una leyenda urbana sobre caníbales rurales que viven en esa montaña y que son los que asesinan a la gente para comérsela. Esto convence a Matt que los responsables de los asesinatos son la familia de la caravana con la que habló al principio. Va a buscarlos solo y pistola en mano, y llega a tiempo de salvar a una jovencita que iba a convertirse en el ingrediente principal del guiso del día.
No está mal narrada. Se logra transmitir tensión en algunos momentos, pero en general el desarrollo de la historia se me ha hecho rutinario y el protagonista no puede ser menos carismático. Todo lo relacionado con la familia de caníbales son los tópicos mil veces repetidos en este tipo de tramas. A ver cuantos de los siguientes os suenan:
-Un grupo de chavales se adentran en el hospital abandonado para filmar su propio corto de terror. Alguien sabotea su vehículo obligándolos a permanecer allí, y poco después son liquidados.
-Una pareja se dispone a hacer el amor en un coche. El chico sale a investigar porque ven a alguien rondando. La chica espera en el coche, y de pronto el cadáver del chico cae desde la rama de un árbol cercano y queda colgando sobre el capó.
-Los antropófagos guardan cabezas cortadas y tarros con carne humana en una nevera, además de elaborar adornos con restos humanos.
-A pesar que debido a su deficiente alimentación y mala calidad de vida deberían ser físicamente débiles, los antropófagos tienen una fuerza desproporcionada.
En ese sentido es lo de siempre, pero cuando lo que te apetece es precisamente que te den lo de siempre, no hay problema con eso.
Sin embargo, basta con leer este bolsilibro para darse cuenta de cual fue el gran fallo de la colección. El formato imitaba el tamaño y la estética de los bolsilibros de Bruguera (incluso el autor se pone un seudónimo que suena a extranjero) y el precio no era tan alto como para que alguien que los echara de menos se privara de comprarlos, pero eso es todo. Lo lees y en ningún momento tienes la sensación de estar leyendo un bolsilibro como los de antes. No sirve de nada imitar el formato y la estética si el contenido no tiene nada que ver.
La historia fue escrita y está ambientada en 2011, y está contada desde la perspectiva de esa época. Los personajes usan expresiones y lenguaje moderno, emplean ordenadores portátiles, ven DVDs, hablan por teléfonos móviles, y todo esto choca mucho si lo lees esperando una atmósfera similar a la de los bolsilibros. Las referencias a ordenadores y móviles se sienten anacrónicas, incluso sabiendo en que año tiene lugar la historia. En general no tiene un estilo que recuerde al de las colecciones que se supone que pretende imitar u homenajear.
Los responsables de esta colección quizá no entendieron que los bolsilibros no fueron solo un formato, sino que tenían un estilo determinado y una serie de convenciones y tópicos. En este libro, una vez pasamos de la portada toda sensación de estar leyendo un bolsilibro se pierde, y lo que tenemos es simplemente un relato corto de terror. Uno que sería muy disfrutable de encontrarlo como parte de una antología en un libro de relatos cortos genéricos, porque no es malo en absoluto. Es una trama de psicópatas rurales degenerados muy sencillita pero que te hace pensar de inmediato en franquicias como La matanza de Texas, Las colinas tienen ojos o Wrong Turn, que son un tipo de historias que me gustan mucho. Pero no es lo que (al menos en El Planeta del Espacio) entendemos como un bolsilibro, y eso hace que se sienta un poco como una estafa. En este caso, es la presentación lo que falla.
Puedes ver el tercer título de esta colección pulsando aquí.
No podrás salir. 2011. Damien Wake [Miguel Aguerralde] (texto) Carlos Nuñez de Castro (portada). Selección Pulp Ficción nº 2. Publicado por 23 Escalones.
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